El Ib-Salut licitará un nuevo concurso abierto para seleccionar el proyecto ganador del nuevo Son Dureta, después de que sendos recursos interpuestos entre los dos participantes en el concurso de ideas anterior hayan obligado a desistir de él y a convocar uno nuevo. La portavoz del Govern, Pilar Costa, detalló en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern que la anulación de ese concurso inicial por falta de anonimato en las propuestas "viene de un error administrativo".
Uno de los requisitos del concurso era el anonimato de los aspirantes, pero al reclamar la mesa de contratación una documentación a una de las empresas que concurría, en el envío constaba el nombre.
"Se vulnera la confidencialidad"
Según la portavoz, "finalmente, el tribunal ha dicho que con eso se vulnera la confidencialidad o el anonimato y además la otra empresa que hubiera podido optar había incurrido también en ese mismo error administrativo, porque por otra vía también se había podido acceder a la identificación de la empresa".
"Quedan eliminadas las empresas que en su día se presentaron, pero lo más importante es que el Ib-Salut ha subsanado esta cuestión administrativa llevando adelante el proyecto de derribo, que hará directamente el Ib-Salut, y esperamos poder cumplir los plazos y que aproximadamente en dos meses puedan empezar (en abril)", señaló Costa, que restó importancia al "error administrativo", que asimiló a "las deficiencias en todo procedimiento administrativo".
Precisamente, el Consorcio de Recursos Sociosanitarios y Asistenciales de Balears ya ha abierto el concurso de ideas para la futura residencia para personas en situación de dependencia que se construirá en los terrenos de Son Dureta, tras haber desistido del primero. El concurso está abierto a arquitectos y equipos profesionales de toda Europa y el plazo para presentar los proyectos finaliza el 25 de marzo, informó el Govern.
Capacidad de 120 plazas
La residencia, un edificio de nueva construcción, tendrá una capacidad de 120 plazas y se ubicará en un solar de 13.000 metros cuadrados integrado en el complejo de Son Dureta, que limita por un lado con la calle Illes Balears y por el otro con el torrente del bosque de Bellver.
Seguridad de los usuarios
El solar incluye el actual edificio de gerencia del 061, que se conservará. En el concurso, las propuestas arquitectónicas se ajustarán a las características de una residencia para personas con dependencia, así que el diseño, la organización del programa y la elección de los sistemas de construcción e instalaciones deben dar respuesta a la movilidad y la seguridad de los usuarios y su derecho a la autonomía.
El modelo que se plantea es distribuir las 120 plazas en módulos de 20 plazas (16 habitaciones individuales y 2 dobles), y en función de ello organizar el resto de servicios.
Todas las salas habitables deben tener iluminación y ventilación natural y en la zona residencial y espacios de uso colectivo se diseñarán ventanales con vistas al exterior, especialmente, para las personas que tengan que permanecer en la cama o silla de ruedas.
