"No son unos huesos, es memoria, es respeto, es convivencia, es dignidad, es justicia, es humanidad". De esta manera responde el Govern de Francina Armengol a la senadora del PP Esther Muñoz que criticó destinar dinero a la búsqueda de víctimas del franquismo enterradas en fosas, a lo que se refirió como "desenterrar unos huesos".

El Govern, a iniciativa de la dirección general de Comunicación, ha contestado a la senadora con un vídeo del testimonio de Maria Cunill, hija de un desaparecido durante la Guerra Civil, en Cádiz. "He llevado el luto en vida. No voy de negro, pero me duele el corazón", confiesa esta mallorquina de 82 años: "Sólo le pido a Dios que no me envíe la muerte antes de haberlo traido". "Tengo una tumba donde están un hermano, mi marido, y estaríamos juntos"

, relata. "No le pude dar un último abrazo, y este es el último honor que le puedo dar", expresa la mujer en el emotivo vídeo difundido.

La senadora popular ha tratado de rectificar en los últimos días desde su intervención señalando que con "unos huesos" no se refería a las víctimas del franquismo sino a la exhumación de los restos de Franco, cuando no obstante la partida de quince millones que criticaba se ciñen a la apertura de fosas de los represaliados.

En Balears, el Parlament aprobó en 2016 la ley de fosas para la recuperación de cuerpos de la Guerra Civil. Desde entonces se han hallado en torno a medio centenar de cuerpos de víctimas de la represión.