Las familias y empresas de Balears que se declararon en concurso de acreedores (suspensión de pagos y quiebras) en el cuarto trimestre de 2018 ante la imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas sumaron un total de 46 deudores concursados, lo que representa un aumento del 64,3 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

Así lo revela la Estadística del Procedimiento Concursal publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según los datos del INE, en Balears prácticamente todos los concursos (44) fueron voluntarios y solamente dos eran necesarios.

Un total de 37 concursos se tramitaron mediante procedimiento abreviado y nueve como procedimiento ordinario. Todos ellos se hicieron sin existencia de propuesta anticipada.

Del total de deudores concursados, 12 eran personas físicas sin actividad empresarial y el resto, empresas, que a su vez se dividen en sociedades de responsabilidad limitada (31), personas físicas (dos) y sociedades anónimas (una).

De las 34 empresas concursadas, una se dedicaba a la energía, siete a la construcción, tres al comercio al por mayor, siete al comercio al por menor y vehículos, tres al transporte y almacenamiento, una a la hostelería, una a inmobiliarias financieras y seguros, dos a actividades profesionales, dos a actividades administrativas y servicios auxiliares, cuatro al resto de servicios y una sin clasificar.

Además, de las 34 empresas concursadas en Balears, la mayoría tenía menos de 20 asalariados y sólo dos estaba entre el tramos entre 20 y 49 asalariados. En cuanto al volumen de negocio, la mayoría no llegaban a los dos millones de euros, y solo una se encuentra en el tramo de entre los dos y los cinco millones. Por antigüedad, nueve empresas tenían cuatro años o menos y seis entre cinco y ocho años.