Valldemossa es el municipio más rico de las islas, con una renta media por residente de 21.458 euros en 2015, seguido de Esporles, con 19.837 euros, y Deià, con 19.534 euros, según los datos facilitados por el Instituto Balear de Estadística (Ibestat) y el Consell Econòmic i Social (CES). Por contra, el municipio más pobre es Formentera, con 10.661 euros y, en el caso de Mallorca, los últimos puestos corresponden a Escorca, con 12.535 euros; Costitx, con 12.725; e Inca, con 13.338 euros. La media del archipiélago se sitúa en los 14.893 euros en 2015, solo un 2,4% por encima de la española.

Estos datos fueron facilitados este viernes con el conseller de Trabajo, Iago Negueruela; el presidente del CES, Carles Manera, y el director general de Economía, Llorenç Pou, durante la presentación de una nueva herramienta facilitada por el Ibestat que permitirá ir midiendo la renta municipal disponible en los hogares de Baleares.

Según este informe, la renta media disponible alcanzó un valor global para el conjunto de las islas de 16.709 millones de euros en 2015, lo que supone un crecimiento de solo el 4,2% respecto a 2012, un aumento que Negueruela ha calificado de mínimo y que ha achacado a la ausencia de una política salarial clara por parte del PP y al techo que se fijo en las pensiones.

Sobre este punto, el conseller señaló que a medida que se vayan actualizando los datos, se comprobará que se irá dando un aumento más intenso fruto de las subidas salariales fijadas en el convenio de hostelería, entre otros, por la actualización de las pensiones y por la subida del salario mínimo interprofesional.

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