La Ley de medidas urgentes de sostenibilidad ambiental y turística para la isla de Formentera, que busca limitar la entrada de vehículos a la isla, llegará hoy martes al Parlament balear. Así lo anunció ayer la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, tras la VII Conferencia de Presidentes, celebrada en la sede del Consell de Formentera. Armengol destacó que, además de reducir las emisiones contaminantes y dar respuesta a las necesidades de los formenterenses, "acompañamos la norma de una ayuda directa de 350.000 euros" con el objetivo de reforzar la red de transporte público de la isla y dar alternativas al transporte privado. La presidenta reiteró que habrá que realizar una "apuesta fuerte" por el transporte público, "solución" al tener tanto vehículo en Formentera en la temporada alta.
Financiación
La presidenta del ejecutivo balear resaltó el trabajo realizado durante esta legislatura con las administraciones insulares para mejorar su financiación, el traspaso de competencias y el refuerzo de la colaboración institucional y matizó que esta es "la legislatura de los consells".
En este sentido, explicó que ésta será la legislatura con más competencias transferidas a los Consells, como las de promoción turística o de igualdad, entre otras. Sobre los convenios de carreteras, en el caso de Formentera, Armengol recordó que desde hace 8 años no se había renovado dicho acuerdo en la Isla, aunque en los Presupuestos estatales existe la previsión de 1 millón de euros.
La Conferencia de Presidentes contó con la participación del presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer; de Ibiza, Vicent Torres; de Menorca, Susana Mora, y de Mallorca, Miquel Ensenyat. Por parte del Govern balear también asistió la vicepresidenta y consellera de Innovación, Investigación y Turismo, Bel Busquets; la consellera de Presidencia, Pilar Costa, y el conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Pilar CostaMarc Pons
Jaume Ferrer, por su parte, mostró su satisfacción ante el hecho de que hoy se apruebe la ley en el Parlament balear porque "es una demanda histórica de Formentera para regular la entrada de vehículos que vienen a la isla sobre todo en temporada alta".
