Mientras los proyectos para la edificación de nuevas viviendas crecen, se debilitan los relacionados con el desarrollo y mejora de la planta hotelera de Mallorca, según se destaca en el informe presentado ayer por el presidente del Colegio Oficial de Aparejadores, Daniel Tur.

En concreto, a lo largo del pasado año se registraron 148 actuaciones para la reforma o ampliación de hoteles de la isla, lo que supone dos menos que en 2017, es decir, un ligero descenso del 1,3%. Aunque la reducción es mínima, implica romper la tendencia al alza que se había mantenido durante los ejercicios anteriores, y que fue especialmente intensa en 2015, año que se cerró con un crecimiento de este tipo de proyectos del 55,5%. En cualquier caso, esas 148 reformas del pasado año siguen suponiendo una cifra muy alta, superior a la de 2016, 2015 y 2014.

Respecto a los proyectos para la edificación de nuevos hoteles, los aparejadores de Mallorca visaron cinco durante el pasado año, frente a los siete de 2017 o los once de 2015.

En relación con la ligera bajada en las reformas hoteleras, Daniel Tur recordó que coincide con el fin de las ventajas que la ley turística impulsada por el entonces conseller del PP Carlos Delgado dio a los establecimientos que aumentaban su categoría a las cuatro estrellas. En concreto, se dejaba la puerta abierta a que pudieran ganar dos alturas.

Sin embargo, desde el sector hotelero se insiste en que las empresas mantienen la intención de seguir modernizándose y que hay muchos establecimientos que lo han solicitado, pero han achacado la ralentización al "tapón" que se ha creado para su tramitación en la conselleria de Turismo y en algunos ayuntamientos.

En este sentido, el presidente del Colegio de Aparejadores reconoce que se está dando una lentitud excesiva a la hora de obtener los permisos necesarios para estas obras y para las de vivienda, que achacó en buena parte a la falta de medios humanos existente en algunas Administraciones, como puede ser el caso del ayuntamiento de Palma.

Actividad de aparejadores

Al margen del sector turístico, Daniel Tur expuso otros indicadores que reflejan el incremento de la actividad de los aparejadores y que se exponen como síntoma de la reactivación del sector de la construcción.

Así, en 2018 se contabilizaron 2.481 direcciones de obra, superando las 2.456 de 2017; 788 estudios de seguridad más coordinación, por encima de los 786 del año anterior; y 2.062 coordinaciones de seguridad frente a las 1.946 del ejercicio previo. Solo se ha detectado un ligero descenso en los estudios de seguridad, con 708 en 2018 frente a los 709 de 2017.