La Agencia de Defensa del Territorio del Consell de Mallorca y la conselleria de Medio Ambiente del Govern han firmado un protocolo de colaboración en el que los agentes de medio ambiente (AMA) también podrán actuar como policía urbanística contra las obras irregulares en el campo de Mallorca.

De esta forma podrán levantar actas, realizar inspecciones contra el urbanismo ilegal en el suelo rústico y espacios protegidos en la Red Natura 2000. Esta colaboración ya se lleva realizando hace más de un año y por ello se ha podido cazar a unos 100 infractores por parte de los agentes de medio ambiente. Lo que ocurre es que ahora se formaliza con la intención de que se pueda actuar contra una obra ilegal en menos de 48 horas. Antes los expedientes tardaban hasta tres meses en ponerse en marcha en el Consell y en muchas ocasiones la obra ilegal ya estaba acabada.

El conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, ha indicado que esta colaboración ya ha tenido sus frutos "con más de 100 actuaciones conjuntas por parte de nuestros 65 agentes de medio ambiente y el Consell". Vidal ha añadido que se incrementará la plantilla en tres agentes más. El cuerpo ambiental tendrá habilitado un correo electrónico donde se pondrá en marcha el expediente en el caso de que la obra detectada sea irregular en menos de 48 horas para que el Consell la pueda paralizar de forma inmediata.

Por su parte, la consellera de Territorio del Consell, Mercedes Garrido ha explicado que "nuestra intención no es ni sancionar ni recaudar, nuestro objetivo es la preservación de nuestro territorio y, por ello, es tan importante la colaboración entre administraciones". Garrido ha recordado que con la nueva Ley de Urbanismo el Consell tiene la potestad para actuar en todo el suelo rústico protegido de cualquier municipio de Mallorca, incluido Palma.

El pasado año, la Agencia de Defensa del Territorio dictó en torno a las 180 órdenes de demolición de obras ilegales levantadas en el suelo rústico de Mallorca. Muchas de ellas en fines de semana y en época de vacaciones para eludir las inspecciones del Consell. Un porcentaje elevado de estas obras ilegales habían sido edificadas en suelo rústico con algún tipo de protección.