El Servei de Salut se personó el año pasado en 25 demandas presentadas por agresiones realizadas a su personal sanitario. Estas personaciones van en aumento ya que en el ejercicio precedente, 2017, se tuvo que personar en 20; en 10 en 2016 y en 7 en el año 2015, según datos facilitados por el propio IB-Salut.

Con respecto a las personaciones en las 25 demandas del año pasado, éstas ya han originado tres condenas, una por un delito de atentado a la autoridad (como se recordará, desde la reforma del Código Penal acometida en el año 2015 las agresiones que se realizan tanto sobre personal sanitario como educativo son calificadas de atentado a la autoridad pública, delito que conlleva penas de hasta cuatro años de prisión) y dos delitos leves de lesiones; otra por un delito de amenazas leves y la tercera por un delito de amenazas.

194 agresiones en un lustro

Pese a que la mayoría de las agresiones son verbales y, por tanto, no dan lugar a demandas, en el año 2014 se produjeron 45 agresiones físicas; 36 en 2015; 39 en 2016; 61 en 2017 y 13 hasta el mes de mayo de 2018. Estas cifras, facilitadas por el Servei de Salut, permiten concluir que en los últimos cuatro años y medio se han producido un total de 194 agresiones físicas a personal sanitario en esta comunidad.

Sobre las categorías profesionales objeto de más ataques, en el periodo analizado (2014-mayo de 2018), el colectivo más atacado es el de enfermería con un total de 574 agresiones recibidas en estos cuatro años y medio. Les siguen a escasa distancia los médicos que en este lapso temporal sufrieron 549 ataques de todo tipo.

El tercer lugar lo ocupan los técnicos de enfermería, con 299 agresiones, y la cuarta posición la ostenta el personal administrativo que suma 215 ataques desde enero de 2014 a mayo de 2018. Estas cifras aluden a todo tipo de agresiones que el Servei de Salut ha clasificado en cuatro modalidades diferentes: físicas, verbales, económicas y simbólicas cuando tan solo se trata de algún gesto denigrante para el profesional.

Por último, sobre los lugares físicos que son más frecuentemente escenarios de estas agresiones, las cifras del Servei de Salut hablan de las plantas hospitalarias como zona más habitual con 402 agresiones en este periodo seguida muy de cerca por las consultas, escenario de 400 acciones violentas. El tercer lugar, con 384 intimidaciones al personal sanitario, son los servicios de urgencias y el cuarto las zonas de admisión donde se produjeron 174 ataques.