El empresario de la noche Bartolomé Cursach alegará el próximo viernes ante el juez Miguel Florit que las supuestas fiestas en su discoteca Tito's, donde habría invitado a un grupo de policías locales a cocaína, prostitutas y alcohol no eran constitutivas de delito. Cursach, al igual que su ex número dos Bartolomé Sbert, dos empleados suyos y once policías, entre ellos el exjefe del cuerpo Antoni Vera, se oponen a ser juzgados por un tribunal popular, acusados de un supuesto cohecho impropio.

Ayer estaba prevista la celebración de una vista de fijación de los hechos que serán objeto de juicio por un jurado, pero no pudo celebrarse por la ausencia de dos de los policías investigados, que no habían podido ser citados al hallarse fuera de Mallorca.

Los que sí acudieron fueron los otros 9 funcionarios, Cursach, Sbert, y sus dos empleados. La vista se ha señalado para el próximo viernes.

Posible prescripción

El delito imputado a los quince investigados es un cohecho pasivo impropio, que se da cuando el funcionario, o servidor público, acepta, recibe o solicita, directa o indirectamente donativo, promesa o cualquier otra ventaja o beneficio indebido para realizar un acto propio de su cargo o empleo.

La defensa de Cursach argumentará que invitar a copas no es delictivo, la prostitución tampoco lo es, si no se produce con menores, y el invitar a cocaína sería a lo sumo un delito contra la salud pública, que no corresponde ser enjuiciado por un jurado.

El cohecho pasivo impropio tiene un plazo de prescripción muy corto y las defensas alegarán que la fiscalía no ha concretado en qué fechas se celebraban esas supuestas fiestas en el reservado vip de la discoteca del Paseo Marítimo.

Otra de las razones para oponerse a ese juicio por jurado es que existen en el sumario más piezas donde se atribuyen a Cursach cohechos propios al haber, supuestamente, sobornado a funcionarios de las Policías Locales de Palma y Calvià y del PalmaCalviàGovern para que le beneficiaran en sus negocios y perjudicaran a la competencia. La tesis es que los dos tipos de cohechos se tendrían que juzgar de manera conjunta. Varios de los investigados han recurrido la formación de esa causa por jurado, entre ellos Sbert.