Somos una región históricamente emprendedora y en 2017 ha habido un repunte, sin embargo hemos perdido el coliderazgo que compartíamos con Cataluña a nivel nacional, que nos situaba, en los primeros puestos, tras Madrid. Tenemos menos "impulso" y lo que es más grave, las grandes corporaciones dan la espalda a los que quieren emprender porque no se implican en la financiación de sus proyectos. Esta es una rémora para la innovación en el archipiélago y para el sector turístico.

Estas son algunas de las conclusiones el primer informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) que se realiza en Baleares, correspondiente a 2017, la única comunidad autónoma, junto con Asturias y Melilla, que no participaba en este observatorio internacional del fenómeno emprendedor que se realiza cada año desde 1999 y en el que participan 54 países. Su director en Baleares, Julio Batle, profesor del de Conocimiento de Organización de Empresas de la Universitat de les Illes Balears (UIB), lo ha presentado este jueves en el rectorado, junto con el conseller de Trabajo, Comercio e Industria, Iago Negueruela, el rector, Llorenç Huguet, el vicerrector de Innovación y Relaciones Institucionales, Jordi Llabrés, y la directora gerente del Instituto de Innovación Empresarial, Núria Hinojosa.

En Balears se identifican más oportunidades y emprendimientos que en líneas generales en España, con proyectos con mayor carácter internacional y mayor uso de la tecnología. También son menos los emprendimientos "por necesidad" respecto a otras comunidades autónomas. Todas son "buenas noticias para nuestra competitividad", concluye Batle, tras haberse analizado 1.000 encuestas a la población y 39 entrevistas con expertos. De otro lado están "las asignaturas pendientes" del archipiélago, donde pesan mucho el comportamiento de las grandes empresas. En este sentido se apunta a las grandes cadenas hoteleras.

El submundo corporativo y el emprendedor no están bien entrelazados, se afirma en el GEM 2017 de Baleares, aspecto más que relevante para la innovación de la comunidad autónoma y para el sector turístico en concreto, que es clave. Las grandes corporaciones tienen en su poder la posibilidad de financiar a los emprendedores, como clientes de las nuevas empresas emergentes (star-ups), en lugar de integrarlas en sus estructuras, contando con sus propias incubadoras. También creando fondos de inversión. Estas son tendencias mundiales desconocidas o apenas exploradas en la comunidad autónoma. La inversión en emprendimiento está "poco desarrollada", lo que no es "una buena noticia" y el intraemprendimiento, dentro de las propias empresas, "se desconoce" en el archipiélago.Varón de entre 35-45 años

El perfil del emprendedor en Baleares es el de un varón de entre 35-45 años, con estudios superiores y un nivel alto de renta y está motivado más por la oportunidad que por la necesidad. Cuanto mayor es el nivel de educación, mayor es la creación de nuevas empresas. Además, es una actividad dominada por los hombres, la brecha de género es mayor en el archipiélago que en España. También la renta es un obstáculo para emprender.

La población adulta que tiene entre 16 y 64 años identificada como emprendedora con negocios de menos de 3,5 años de antigüedad se mantiene en el 6,1%, como en 2016. Y seis de cada diez iniciadores de negocios arrancan con menos de 50.000 euros. La tasa de inversión informal se sitúa por debajo de la media estatal con una inversión igual o superior a 12.000 euros en más de la mitad de los casos.

El 81% de los emprendedores en fase inicial se dedican a ofrecer servicios para los que no se necesitan conocimientos como por ejemplo montar una tienda en lugar de ofrecer servicios a otras empresas, otra asignatura pendiente en Baleares respecto a la media española. En la balanza positiva, destaca la orientación internacional de la población emprendedora, con el 29%, cinco puntos por encima que el conjunto del estado.

Desde el punto de vista fiscal, es necesario una política de incentivos, que deben propiciar las administraciones públicas, junto con capital propio sobre todo para proyectos estratégicos en sectores como nuevos desarrollos y tecnologías para el turismo o la nanotecnología. Los expertos piden para que Baleares recupere su liderazgo emprendedor a nivel nacional "imaginación, riesgo, carácter experimental" tanto por parte de las instituciones públicas como las privadas, en resumen "una actitud mayor de experimentación", advierte el doctor Julio Batle.

Para el conseller Negueruela es destacable que tres cada cuatro personas desarrollen sus proyectos porque quieren emprender y no por necesidad como en otras comunidades. Llama la atención sobre el déficit en emprendimientos femeninos e insiste en la necesidad de que las empresas impulsen estas iniciativas a través de sus estructuras. Por otro lado todavía en la Universitat el emprendimiento es nuevo, reconoce el rector, de ahí la necesidad de "educar en el riesgo".