Europa Press y su redactora Blanca Pou han presentado un recurso contra la decisión del instructor del caso Cursach, Miguel Florit, de rechazar su personación en la pieza abierta por presunta revelación de secretos, en un escrito el que contestan al juez que la periodista "protestó repetidamente" por la incautación del material.

En este recurso, Europa Press sostiene "con toda rotundidad" que la afirmación del juez de que no se formulara protesta "no es cierta" y que si se produjo la incautación fue porque la Policía se llevó el material -un móvil, un pendrive, ordenadores y diversa documentación- "en ejecución de una resolución judicial".

Por este motivo, tanto la agencia de noticias como la redactora insisten en personarse alegando que se han vulnerado sus derechos constitucionales y que el auto de Florit genera "indefensión".

Hay testigos que "pueden dar fe de que la entrega no fue voluntaria"

En el recurso, la representación legal de Europa Press y Blanca Pou denuncia que el auto que denegaba la personación "para fundamentar su parte dispositiva, vierte manifestaciones que son absolutamente inaceptables y que no se ajustan a la realidad".

En particular, subraya que la periodista "en todo momento manifestó en el acto de incautación de los equipos y documentación que ello violaba gravemente sus derechos, entre ellos su derecho al secreto profesional". Además, Pou "pidió que se le permitiera hablar con un abogado" pero "le fue negado".

Igualmente, el recurso incide en que no se entregó copia del acta de la incautación y que tampoco se ha podido acceder posteriormente a la misma. En todo caso, advierte, "existen diversos testigos de lo allí ocurrido que pueden dar fe de que la entrega no fue en absoluto voluntaria".

La incautación se produjo el martes 11 de diciembre, día en que tres policías y una secretaria judicial se presentaron en la sede de Europa Press en Baleares con una orden judicial. Esa mañana también requisaron el móvil al periodista de Diario de Mallorca José Francisco Mestre, en este caso en los Juzgados.

Por la tarde, dos de los policías acudieron a la sede del periódico, si bien no se llevaron ningún material al ir sin orden judicial y sin estar acompañados de la letrada de la Administración de Justicia.

Derechos constitucionales

El recurso también argumenta que el auto "supone un brutal ataque" contra derechos constitucionales porque impide a Europa Press y a la periodista personarse "en un procedimiento judicial que les afecta directamente y en el cual se han visto gravemente vulnerados sus más elementales derechos, ocasionándoles una profunda indefensión".

Esta indefensión, apunta el letrado, "llega hasta el punto de negarse a notificar a mis representadas el contenido íntegro de un auto que acuerda la intervención de bienes de su propiedad y de los datos en ellos contenidos y la entrada y registro en sus oficinas".

Por todo ello, Europa Press y su periodista insisten en personarse. "Una sociedad democrática avanzada, como la que se propugna en el propio preámbulo constitucional, jamás entendería que después de haberse producido tan brutal atropello de los derechos constitucionales de mis representadas, además se las prive de personarse en las actuaciones para combatirlo", alega el letrado.

Igualmente, en el recurso también se protesta por que no se entregara el contenido íntegro del auto que acordaba la intervención de los bienes y la entrada y registro de las oficinas, sino solamente su parte dispositiva. De este modo, aduce, Europa Press y la redactora quedaban privadas de "conocer en base a qué un juez acuerda medidas que les afectan tan directamente y que han vulnerado tan gravemente sus derechos". Además, recalca que este acto "que no tiene precedente alguno ni en derecho español ni en el de cualquier nación que se califique de estado de derecho".

El escrito que ha presentado Europa Press es un recurso de reforma y subsidiario de apelación. Esto implica que, en caso de que Florit lo desestime, quedaría presentada la apelación ante la Audiencia Provincial de Baleares.