Una madre y sus dos hijos, uno de ellos con una discapacidad del 85%, han sido desahuciados este lunes de su vivienda en la calle del Temple número 8, en Palma. Stop Desahucios y unos cuarenta vecinos han hecho todo lo posible para tratar de evitar el lanzamiento, pero finalmente, a las 13.30 horas, la comitiva judicial, acompañada de la Policía Nacional, ha procedido a su ejecución.
La familia pagaba un alquiler de casi 800 euros mensuales, cuantía que debido a sus circunstancias le era imposible pagar. Habían solicitado un aplazamiento, que les fue denegado, por lo que se fijó el lanzamiento para este lunes a las 13.30 horas, de lo cual Stop Desahucios ha tenido conocimiento media hora antes. Inmediatamente se ha movilizado y ha conseguido que los vecinos de la zona participen de la acción. "Ha sido ejemplar la participación de quienes se encontraban en la zona, en pocos minutos había unas cuarenta personas", relatan desde la plataforma.
La madre y sus dos hijos se encuentran en estos momentos en un alojamiento temporal, en el que permanecerán durante un periodo máximo de una semana. Al parecer la familia "se ha visto sobrepasada por la situación" y no ha sabido cómo actuar ante los hechos, por este motivo desde la plataforma aseguran que tratarán de hacer todo lo posible, "como colectivo podemos tratar de buscar una solución".
Desde Stop Desahucios denuncian la fuerte carga policial con la que se ha realizado el desahucio de la familia. "Nos han agarrado y empujado, también a personas mayores", por lo que la miembros de la plataforma aseguran que tomarán medidas legales contra la Policía Nacional, ya denunciada por ellos con anterioridad por haber llevado a cabo el mismo modus operandi en otro lanzamiento.
La familia ya había sido desahuciada anteriormente de otra vivienda. El hijo de unos 22 años de edad con una discapacidad del 85% no percibía ninguna ayuda por aquel entonces y acabó siendo imposible para ellos recaudar la mensualidad exigida. Por este motivo, se vieron obligados a residir en el centro de acogida SAM familias durante un tiempo, hasta que hace un año y medio fueron expulsados "sin alternativa", como así lo explica la plataforma antidesahucios, del centro de la calle Socors.
Ante esas circunstancias, la madre y sus dos hijos tuvieron que alojarse en un hostal, en el que permanecieron hasta conseguir un nuevo alquiler. Según Stop Desahucios, durante ese tiempo el ayuntamiento de Palma ofreció a la familia dos contratos "abusivos de alquiler". En la primera ocasión, este "incluía cláusulas de carácter social inquisitoriales", relatan, como por ejemplo la exigencia de que el hijo con una discapacidad del 85%, que acudía diariamente a un centro especial, tuviera que estar cada día hasta las 17 horas en él sin excepciones, "cuando la madre, si se daba el caso y podía, lo recogía antes de tiempo para poder estar con él antes", explican. Además, dicho contrato exigía una fianza "de miles de euros porque conocían que la madre había conseguido una cantidad de dinero tras lograr, tras muchos esfuerzos, la ayuda por la discapacidad de su hijo", denuncian.
A pesar de las excesivas cláusulas del contrato, Stop Desahucios, viendo la situación crítica de la familia, aconsejó que aceptaran la solución que les ofrecía el Ayuntamiento, sin embargo la madre la rechazó. Esto mismo ocurrió en la segunda ocasión, cuando Cort ofreció las mismas cláusulas sociales abusivas, aunque solicitando una cuantía inferior como fianza.
La familia decidió buscar una solución por su cuenta y consiguió alquilar una vivienda en la calle del Temple número 8. El importe del alquiler ascendía a casi 800 euros, motivo por el cual pronto se vieron en la misma situación, no pudieron asumirlo y recibieron una orden de desahucio, orden que ni los vecinos de la zona ni Stop Desahucios han podido parar este lunes.
