El observatorio de detección de ondas gravitacionales LIGO junto a la colaboración del interferómetro Virgo han detectado cuatro nuevas ondas gravitacionales, entre las que destaca la más masiva y distante jamás hallada.

Desde la Universitat balear se han destacado las "importantes contribuciones" que su equipo de investigadores, bajo la dirección de Alícia Sintes, han realizado en la observación y análisis de la señales detectadas.

Estos resultados, procedentes de los detectores de olas gravitacionales LIGO, operados por la Fundación Nacional para la Ciencia de los Estados Unidos (NSF) y Virgo, se dieron a conocer el sábado 1 de diciembre, en el marco del Congreso de Física de Ondas Gravitacionales y Astronomía, que ha tenido lugar en la ciudad de College Park (Maryland, Estados Unidos).

Hasta el momento, la colaboración científica LIGO y Virgo, su homólogo europeo, han permitido detectar en total 10 fusiones de agujeros negros de masa estelar y una fusión de estrellas de neutrones, que son los restos densos y esféricos del colapso de estrellas.

De estas diez fusiones de agujeros negros, hay cuatro que corresponden a la nueva tanda de detecciones, mientras que las seis restantes ya se habían presentado otras veces.

Las cuatro nuevas detecciones, etiquetadas como GW170729, GW170809, GW170818, y GW170823, en referencia a la fecha de detección, se produjeron en el segundo periodo de observación, entre el 30 de noviembre de 2016 y el 25 de agosto de 2017.

De las cuatro nuevas detecciones, destaca el evento GW170729, detectado el 29 de julio de 2017, pues es la fuente de ondas gravitacionales más masiva y distante jamás observada. La fusión ocurrió a aproximadamente 5.000 millones de años luz, generando una energía gravitacional equivalente a casi cinco masas solares.

Además, el evento GW170814 fue la primera fusión binaria de agujeros negros medida por la red de tres detectores, y permitió las primeras pruebas de polarización de ondas gravitacionales (análoga a la polarización de la luz).

En estas nuevas detecciones ha participado el Grupo de Relatividad y Gravitación (GRG) de la UIB. Desde la Universitat han asegurado que el GRG ha hecho "importantes contribuciones". En concreto, una de las aportaciones "clave" de este grupo ha sido la provisión de modelos de señales procedentes de la fusión de sistemas binarios de agujeros negros.