El nuevo jefe superior de Policía de Balears tomó ayer posesión del cargo entre viejos amigos. Arropado por la cúpula policial y varios de sus predecesores, el comisario Gonzalo Espino Gonzalo Espinoesbozó en su discurso sus prioridades en la etapa que afronta: "Una mayor coordinación, inmediatez y continuidad para un tratamiento integral de la violencia doméstica, de género y sexual, buscando también reducir las segundas victimizaciones". Esta declaración no fue casual. La incorporación de Espino se ha visto marcada por el reciente asesinato de Sacramento Roca, cuatro días después de denunciar el acoso al que la sometía su expareja y posterior asesino. La delegada del Gobierno, Rosario Sánchez, le mostró su agradecimiento por resolver desde un inicio asuntos planteados antes de su incorporación.
La toma de posesión del comisario Espino se celebró ayer en el salón de actos de la delegación de Hacienda de Palma, con la presencia de los principales representantes institucionales de las islas, con la presidenta del Govern, Francina Armengol, a la cabeza. A su alrededor se encontraban la mayoría de los oficiales de la Policía Nacional y dos ilustres veteranos, los ex jefes superiores Elicio Amez y Bartolomé Campaner. Dos viejos conocidos de Espino de los veranos en los que trabajó en la isla como jefe de seguridad de la reina Sofía. El propio jefe superior lo recordó ayer, al considerar su nombramiento la oportunidad de "reanudar la estrecha relación que siempre he mantenido con estas islas y su población".
Durante su alocución trazó sus líneas básicas de actuación: la seguridad ciudadana, para "mejorar la calidad de vida de la población"; la cooperación con los otros cuerpos policiales; la máxima colaboración con la autoridad judicial y el ministerio fiscal; la persecución del tráfico de droga a pequeña escala, "sobre todo en centros educativos y centros de ocio"; y la lucha contra la delincuencia organizada.
El jefe superior hizo una especial mención al reciente asesinato de Sacramento Roca, y anunció su voluntad de luchar contra la violencia de género.
La delegada del Gobierno le mostró su agradecimiento por la "ilusión e implicación mostrada desde el primer momento para resolver asuntos ya planteados", en clara referencia a la prevista reestructuración de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam), el grupo especial contra la violencia de género. Rosario Sánchez destacó el "excelente equipo de profesionales" con que cuenta la Policía e incidió en "las necesidades especiales" de Balears, como comunidad esencialmente turística, en la que "la prosperidad depende de la seguridad como destino familiar".
