Javier Rodrigo de Santos aspira a reintegrarse en la función pública por una vía legal basada en la Constitución, donde se proclama que la finalidad de las penas es la reinserción social .

En las aspiraciones de De Santos, que es testigo de cargo en causas por corrupción contra el PP, se cruzó hace casi un año la denuncia de dos jóvenes presos por presunta agresión sexual. El exedil trabajaba en una ONG dedicada a la ayuda de reclusos y dirigía un piso con internos en tercer grado, aspirantes a conseguir la libertad. Dos de estos reclusos le denunciaron por supuestas coacciones para mantener sexo a cambio de informes favorables a su libertad. De Santos niega los hechos y dice que la denuncia es una venganza por haberlos expulsado del piso.