"No es cierto que el plan estratégico de la atención pediátrica en las islas esté parado. En este momento está en fase de revisiones en el Servei de Salut", sostenía ayer Francisco Cárceles, subdirector de hospitales del IB-Salut que quiso subrayar a continuación que la asistencia a los pacientes más menudos de las islas está garantizada.

El subdirector respondía así a las denuncias vertidas por las dos principales asociaciones pediátricas de Balears -SOPEBA y la Asociación de Pediatría de Atención Primaria de las islas (APapIB)- de que el citado plan que se inició en el año 2014 llevaba dos años, desde 2016, parado.

Cárceles reveló que el Servei de Salut tiene dotadas 124 plazas de pediatras en la atención hospitalaria y que, sin embargo, en realidad cuenta con 128 profesionales en nómina. De lo que no dió razón es por qué entonces se producen descubiertos en las guardias médicas de esta especialidad o por qué estas guardias deben ser realizadas por pediatras de Atención Primaria.

Misma calidad y servicio

Además, Cárceles subrayó que la asistencia a los menores en los centros de salud no corre peligro toda vez que se realiza por parte de los médicos de cabecera, profesionales de los que dijo que garantizan "la misma calidad y servicio" que puede ofrecer un facultativo con los cuatro años de especialidad en Pediatría.

Sobre la posibilidad de centralizar en varios puntos de la part forana la asistencia pediátrica para paliar la escasez de estos profesionales, algo que contemplaba el plan que está siendo evaluado, el responsable del IB-Salut señaló que igualmente está en estudio.

Por último, Cárceles aseguró que las oposiciones de Pediatría del pasado domingo para Primaria contemplan la exigencia de que la persona que se haga con la plaza permanezca en ella un mínimo de un año para evitar así su fuga a otros niveles asistenciales.