El Govern gastará el año que viene 450 millones de euros más que en 2018. Los presupuestos autonómicos para 2019, los últimos de la actual legislatura, ascienden a 5.457 millones, lo que los vuelven a convertir un año más en los presupuestos más elevados de la historia de Baleares y que suponen 1.421 millones de euros más para las arcas autonómicas que cuando empezó el mandato de Francina Armengol. De los 450 millones que dispondrá de más el Govern, 251 millones irán destinados a políticas de Salud, Educación, Servicios Sociales, Ocupación y Vivienda.

El Consell de Govern ha aprobado hoy en una reunión extraordinaria las cuentas autonómicas para el año que viene que el miércoles iniciarán su tramitación parlamentaria. De los 5.457 millones a los que ascienden los últimos presupuestos de la legislatura, 3.076 se destinarán a políticas sociales. La mejora de los presupuestos se debe a una mejora de la financiación autonómica del Estado y de la recaudación de impuestos propios.

En términos absolutos, la partida que más crece será Salud, que aumenta en 145 millones de euros hasta los 1.726 euros -uno de cada tres euros del presupuesto autonómico. Según ha explicado la consellera de Hacienda, Catalina Cladera, este aumento se justifica por el fin del copago farmacéutico de los pensionistas, para la que el Govern, como ha informado hoy este diario, se estima en 13 millones de euros anuales, además de la puesta en marcha del decreto de garantía de demora, por el que la sanidad pública deberá costear la atención en la sanidad privada cuando un paciente lleve más de seis meses en lista de espera.

Inversión pública de niveles previos a la crisis

También aumenta Educación, tal y como había anunciado la presidenta del Govern, Francina Armengol, en el debate del Estado de la Comunidad, que suben 64 millones alcanzan los 1.000 millones reivindicados desde inicio de legislatura por la comunidad educativa. Servicios Sociales retrocede 4 millones, por la transferencia de la competencia al Consell. Según la consellera Cladera, realmente en esta partida hay un aumento de 20 millones. Vivienda es el área que más crece, al pasar de 24 a 57 millones, más del doble que deben servir para la construcción de nueva vivienda pública y la puesta en marcha de la Oficina de Vivienda Vacía, que contempla la Ley balear de Vivienda.

Por capítulos, cabe destacar el aumento del capitulo de gasto de personal en 93 millones de euros, un 6 por ciento, que Cladera ha justificado en el aumento de plazas públicas durante este año y el próximo, en el que ha asegurado se crearán 70 nuevas plazas, y por el acuerdo a nivel nacional entre Gobierno y sindicatos para aumentar los salarios públicos un 2,5 por ciento en los próximos presupuestos, para lo que el Govern ya ha hecho la previsión.

La inversión pública asciende a 610 millones, lo que según Cladera, coloca a Baleares en niveles de inversión previos a la crisis, y se concentrarán principlamente en infraestructuras educativas y sanitarias, servicios ferroviarios y en vivienda pública. 989 millones de los presupuestos se destinarán a la amortización de deuda pública, que este año crecerá en unos 30 millones, según la consellera, que entran dentro del déficit permitido.