La ministra de Economía, Nadia Calviño, se ha mostrado esta mañana optimista en Palma ante la situación económica de España, que crece de forma "robusta" y crea empleo "a buen ritmo", a la vez que ha defendido las políticas del Gobierno de Pedro Sánchez con el objetivo, según ha dicho, de seguir creciendo de "forma sostenible".
Calviño ha efectuado estas declaraciones durante su intervención en el XVII Congreso Directivos CEDE, que se celebra hoy en el Palacio de Congresos de Palma y que será clausurado esta tarde por el Rey. El encuentro ha comenzado con un minuto de silencio por las víctimas de las inundaciones de Sant Llorenç. Tras la bienvenida a cargo de Antonio Garrigues, presidente del Senado de la Fundación CEDE; Carmen Riu presidenta del Comité Técnico del Congreso, y Antoni Noguera, alcalde de Palma, el presidente de la Fundación CEDE, Isidro Fainé, ha sido el encargado de presentar a la ministra cuyas primeras palabras han sido también para enviar un "caluroso recuerdo" por las víctimas de la riada del pasado día 9.
Calviño ha centrado su intervención en la necesidad de crecer económicamente con el objetivo prioritario de aumentar el bienestar del conjunto del país. "No se trata solo de crecer económicamente, sino de hacerlo de manera inclusiva, garantizando que nadie quede detrás", ha dicho la ministra quien ha precisado que esa es la tarea de la que se encarga el Gobierno en un "contexto económico favorable" para el país.
En este sentido ha resaltado que este año la economía española crecerá un 2,6 por ciento y en 2019, un 2,3 por ciento. "Se trata de una previsión prudente y realista, que sitúa a España por encima de la media de los países de la zona euro". A ello ha añadido que la creación de empleo será del 2,5 por ciento este año y del 2,3 en 2019, año en el que la tasa de desempleo se reducirá en un 13,8 por ciento, según sus previsiones.
No obstante, ha incidido en que en este contexto favorable "hay sombras", en especial una"tasa de temporalidad laboral alta" que ha insistido que debe cambiarse. "Crecemos de forma robusta por encima de la zona euro, pero para garantizar un crecimiento sostenible e inclusivo la política económica debe cambiar de paso", ha dicho. Este cambio debe producirse sobre los "pilares" de la "disciplina presupuestaria, las reformas estructurales para un crecimiento más sostenible y la consolidación fiscal".
La ministra ha defendido que el Gobierno de Pedro Sánchez ha propuesto unos presupuestos públicos "acordes con un ajuste estructural" que permitirá alcanzar superávit "por primera vez desde 2007" y comenzar a reducir la deuda pública de forma decidida. "España ha cogido la bandera del ajuste fiscal responsable y ambicioso para reducir la deuda pública" ha afirmado Calviño.
Junto a ello, ha insistido en que "la clave de la riqueza de las naciones, del nivel de desarrollo y bienestar" ante la cuarta revolución industrial con las nuevas tecnologías como protagonistas es el cuidado del "capital humano", ante lo cual ha reiterado la necesidad de un mercado laboral "más estable".
"Si nos movemos con inteligencia, realismo y lealtad no hay dudas de que España sacará el máximo partido", ha concluído la ministra.
Álvarez-Pallete
Tras la intervención de la ministra, el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha ofrecido una conferencia sobre la "disrupción exponencial" que supone la revolución tecnológica, cuya dimensión es "cuatro veces la que supuso la revolución industrial".
"Nunca ante otra generación de seres humanos ha vivido un cambio tecnológico como el actual", ha dicho el directivo de Telefónica quien ha afirmado que "en los próximos 20 años la humanidad va a cambiar más que en los últimos 300 años".
Como ejemplo, ha mencionado que en la actualidad "muchos han sustituido a los maestros por Google" y ha advertido sobre los riesgos que supone. "Es el momento de la educación para preparar a las generaciones presentes y futuras de cara a lo que vendrá", ha insistido antes de dejar claro que, en este contexto, "no cambiar no es una opción" para las empresas. En ese cambio, ha defendido la"importancia de los valores" a la hora de afrontarlo. "La tecnología va a estar, pero el valor añadido será cómo la usamos como personas", ha afirmado.
