El Govern aprobó ayer el decreto de garantía de demora, por el que se establecen plazos máximos para que los pacientes reciban asistencia sanitaria en la red de la sanidad pública balear, de tal modo que si se superan estos plazos el IB-Salut deberá ofrecer una alternativa a los usuarios que lo soliciten en centros concertados privados o vinculados a la red pública.

El decreto de garantía de demora incluye la asistencia especializada programada y no urgente para las primeras consultas externas, para las que se fija un plazo máximo de 60 días naturales de espera; primeras pruebas diagnósticas, con también 60 días, e intervenciones quirúrgicas, con 180 días. En estos casos el decreto entrará en vigor en cuanto se publique en el BOIB.

A estos tres supuestos el Ejecutivo ha añadido otro que no figuraba en el decreto de garantía de demora que derogó en la pasada legislatura el Govern del PP. Se trata de las segundas consultas diagnósticas derivadas de una primera consulta, para las que se fija 180 días para ser atendidos en la red pública de Salud y, una vez superado ese plazo, se podrá solicitar que se preste la asistencia en centros privados o concertados. En este caso, el de las segundas consultas diagnósticas, el decreto de garantía de demora entrará en vigor en enero de 2019, ante la necesidad de "adecuar la estructura organizativa del Servei de Salut", según explicó la consellera Patricia Gómez tras el Consell de Govern.

Este decreto supone que el Ib-Salut garantiza que los usuarios de la sanidad pública balear que se encuentren en listas de espera dispondrán de una alternativa, en centros propios o vinculados a la red pública y en centros privados concertados, si el tiempo en ser atendidos supera los plazos marcados. Según los datos aportados ayer por la consellera de Salud, en estos momentos 3.117 pacientes de Balears llevan en lista de espera más tiempo del establecido en el decreto en el caso de las consultas externas y 752 en intervenciones quirúrgicas, lo que significa que 3.869 usuarios de la sanidad pública balear podrían acogerse al decreto de garantía de demora.

Para ello, los pacientes que deseen esta alternativa deben presentar su solicitud en el centro hospitalario en cuya lista de espera estén registrados. Una vez comprobado que se se ha incumplido el plazo máximo, el IB-Salut notificará en 10 días al interesado su derecho a recibir la asistencia en un centro propio, vinculado a la red pública (Sant Joan de Déu y Cruz Roja) o concertado. El paciente dispondrá de 10 días para aceptar la alternativa.