Decenas de turismos y motocicletas destrozados por las riadas están apareciendo en los sótanos, cocheras y aparcamientos de Sant Llorenç, donde los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) Unidad Militar de Emergencias (UME) están esta mañana achicando el agua con sus motobombas.

Los militares, ayudados por cuadrillas de voluntarios, se están dedicando a limpiar la zona cero. De las calles ya han sido retirados numerosos vehículos y otros objetos que impedían, a modo de barricada, la circulación. Los coches destrozados están siendo trasladados a un depósito provisional próximo a la Estación.

Los equipos de limpieza también están aparcando de manera ordenada otros vehículos dañados por la torrentada para facilitar las comunicaciones.

La localidad está cubierta de una gruesa capa de barro y apenas ya se ven charcas de agua por las calles.

Los voluntarios, que están siendo organizados en un Centro de Acogida de la calle Major, trabajan a destajo en los sitios que les indican las autoridades y se mueven en grupos acompañados por agentes de la Policía Local.

Muchos comercios y pequeñas industrias siguen cerrados y sus dueños se están dedicando a sacar de ellos las mercancías y efectos malbaratados por las aguas.

Los voluntarios, en su mayoría jóvenes, trabajan con picos, palas, escobas y cestos y ayudan, junto a los miltares, a los vecinos de Sant Llorenç, que ayer se quejaron de estar un poco desamparados en sus tareas de reconstrucción. Desde el Govern se ha señalado que la prioridad ayer de los equipos de emergencia era rescatar a las víctimas humanas y localizar a los desaparecidos.localizar a los desaparecidos.