Las denuncias de PP y Ciudadanos por supuestos casos de "adoctrinamiento" en los institutos de Felanitx, Marratxí y Sineu en los actos del 1 de octubre han enfrentado esta mañana a estos dos partidos con las fuerzas del Pacto, que han unido a su rechazo a estas críticas el riesgo de que estos posicionamientos políticos de populares y Cs den alas a la extrema derecha, poniendo como ejemplo el masivo acto de Vox este fin de semana en Vistalegre.

El PP llevará mañana al pleno del Parlament estas denuncias por supuesto adoctrinamiento, con una pregunta dirigida al Govern. La portavoz parlamentaria adjunta del PP, Marga Prohens, ha intentando sin embargo marcar distancias con Ciudadanos en este asunto afirmando que los populares "a diferencia de otros partidos" no "criminalizan" a los profesores y "siempre" hablan de "casos puntuales", que cuando se producen deben ponerlos sobre la mesa. En este sentido la dirigente del PP ha acusado al conseller de Educación, Martí March, de "dejadez de funciones" al "consentir" esos casos sin abrir ninguna investigación sobre lo ocurrido. A ello ha añadido la "preocupación" del PP porque Més, socio del PSIB en el Govern, plantee un referéndum de independencia en las islas para 2030 entre sus objetivos. "El objetivo de Més es gobernar cuatro años más para que el caos y la confrontación de Cataluña lleguen a Balears", ha afirmado Prohens quien ha declarado que "ese es el precio de que Armengol (presidenta del Govern y líder del PSIB) se siente en el Consolat de Mar.

Poco antes Olga Ballester, diputada de Ciudadanos, había afirmado que se está produciendo un "adoctrinamiento sistemático desde hace tiempo" en los centros de Balears a causa de la "impunidad" con la que, según ha dicho, se producen, de lo que ha culpado al "silencio cómplice" de Armengol y ha instado al Govern a "dejar de dar la espalda" a estos actos. Fernando Navarro, diputado de Cs en el Congreso, ha añadido a esto la crítica por las "barreras lingüísticas" en la sanidad balear. "Las lenguas cooficiales no pueden utilizarse como cachiporras identitarias", ha declarado Navarro.

Las declaraciones de Ballester han sido de inmediato replicadas por Joana Aina Campomar, de Més, quien ha acusado a PP, Ciudadanos y Vox de crear "crispación" y ha defendido la necesidad de que la izquierda mantenga la unidad para frenar a la "extrema derecha".

El masivo acto de Vox el fin de semana también ha sido resaltado por el portavoz parlamentario socialista, Andreu Alcover, para emplazar a PP y Ciudadanos a no ayudar a que la extrema derecha avance con sus posicionamientos sobre"determinadas políticas", entre ellas las del supuesto adoctrinamiento en los centros escolares. "Lo que no se puede decir es que en todo el sistema educativo hay adoctrinamiento, porque todo suma y las declaraciones de Cs y PP no ayudan (a frenar a la extrema derecha) porque en lugar de paz ponen crispación", ha dicho Alcover. "Añaden leña al fuego", ha añadido tras afirmar que no le "consta" que se hayan producido denuncias por lo ocurrido el 1 de octubre en los institutos de sineu, Felanitx y Marratxí y ha resaltado que en el caso de que estas existieran actuaría inspección educativa.

A pesar de centrar su atención en estas cuestiones, los representantes de PP y Cs han defendido que se encuentran a distancia de Vox. Fernando Navarro ha sostenido que este partido está muy alejado de Cs ya que "el discurso de Vox es populista" apuntando contra la "inmigración". Prohens, por su parte, ha afirmado que a los populares no les preocupa la irrupción de Vox ya que el PP "tiene mu claros sus principios" y confía en que "el efecto Casado que ya está produciendo" frene el avance de esta formación política.