La situación económica en los hogares baleares sigue siendo preocupante este 2018. Cerca de un tercio de la población manifiesta tener dificultades para llegar a fin de mes, mientras que la mitad (55%) vive exclusivamente del sueldo y tan solo el 14% tiene capacidad de ahorro para poder afrontar futuras inseguridades.

Este es el panorama que dibuja la Fundación Gadeso en su análisis de octubre sobre la realidad socioeconómica en las islas para evaluar la confianza de los ciudadanos en un entorno impregnado por los mensajes de recuperación económica.

A pesar de la mejora de los salarios en sectores clave, a partir del convenio de hostelería -tras el acuerdo alcanzado hace un año que fijó un incremento del 17% entre 2918 y 2021-, los datos siguen siendo preocupantes porque los sueldos se mantienen bajos. Se suman los contratos temporales y precarios que conducen a la inseguridad en la economía doméstica.

No obstante, se ha pasado del 40% del índice de familias que tenían en 2015 complicado llegar a fin de mes, a que este año sean tres de cada diez hogares lo que desde Gadeso se califica de "preocupante", dada la "supuesta 'bonanza' de la economía actual".

Por otro lado, se mantiene estable el número de personas que afirman vivir de sus sueldos (55%), aunque las complicaciones en las economías familiares además de afectar a los sectores en riesgo de exclusión, se extienden a las clases medias.

Entre 2015 y y 2014 se ha pasado de un 9% al actual 14% de población que se puede permitir una cierta capacidad de ahorro. Es decir, los hogares en general se ven obligados a frenar el consumo interior, lo que seconsidera el auténtico motor de la mejora real de la economía.

Sueldos indigno

En cuanto a la creación de empleo en la comunidad, el análisis de Gadeso indica que la percepción ciudadana sigue siendo negativa como consecuencia de la tipología de contratos. La mayoría (88%) opina que los empleos que se crean son mayoritariamente temporales y precarios y un 73% piensa que los sueldos no se pueden considerar dignos. Además, siete de cada diez ciudadanos consideran que el sector turístico no tiene capacidad de crear nuevos empleos.

Sobre el conjunto de la economía del archipiélago se aprecia una mejora en en las perspectivas macroeconómicas para 2019, aunque un 40% de ciudadanos muestran un nivel preocupante de incertidumbre.