Al frente del GOB desde diciembre de 2017, Amadeu Corbera se muestra crítico con la gestión del Pacto en general en esta legislatura, en especial en lo que se refiere al Consell de Mallorca. Tras numerosos desencuentros, el proyecto de autopista de Llucmajor a Campos ha desatado esta semana un duro enfrentamiento con el presidente de la institución insular, Miquel Ensenyat (Més), quien lanzó duras acusaciones contra la histórica organización ecologista.
Esta semana han estallado las hostilidades del GOB con Miquel Ensenyat. ¿Tiene algo de razón al acusarles de estar de vacaciones cuando gobierna el PP?
Para nada. Ensenyat viene de una tradición similar a la nuestra. Su partido dice que tiene la misma tradición del ecologismo social. Son unas declaraciones impropias de un dirigente de la izquierda mallorquina que contradicen su propia historia. Pero yo no hablaría de hostilidades. Tenemos un desencuentro profundo con un tema en el que pensábamos que este Pacto estaría por ese cambio que decían. No ha sido así y aquí chocamos. Pero no queremos entrar en un escenario de hostilidades. Es una posición clara, coherente con la trayectoria del GOB, con 45 años de ecologismo en Mallorca. En todo caso los que se han movido de esta trayectoria no somos nosotros, sino el Pacto. Nos centramos en la persona de Miquel Ensenyat porque es el presidente y porque él ha patinado, pero es el Pacto. Ensenyat, Més, Podemos y el PSIB.
De modo que no dan marcha atrás en su petición de dimisión de Ensenyat, Mercedes Garrido (PSIB) y Jesús Jurado (Podemos).
Pedimos que rectifiquen, que sean coherentes con la trayectoria histórica de la izquierda mallorquina, con 45 años de ecologismo. Siempre habíamos defendido juntos el no a esta autopista. En 2015 pensábamos que llevarían esta bandera y se han movido de aquí. Por lo tanto que rectifiquen o que dimitan por estafa democrática.
¿Acudirán a la reunión que desea mantener Ensenyat para calmar los ánimos?
De momento al GOB no le ha llegado ninguna invitación. Si llega y la reunión es para hablar de trabajo, de cómo rectificar este proyecto, claro que iremos. Ahora bien, que no nos espere para hacer según qué paripé. No vamos a ir a lavar la cara a nadie. Todo el mundo es consciente de que esta carretera tiene peligros, pero hablemos de qué se puede hacer sobre eso y sobre todo de qué no podemos hacer, que es esa autopista.
Lo cierto es que es un punto negro. Ensenyat dejó claro que no quería tener ningún muerto en sus espaldas.
Eso fue demagógico. Si se atribuye las víctimas de esta carretera, se tiene que atribuir las de todas las carreteras de Mallorca. De lo que tenemos que hablar es de seguridad, de intervenciones para reducir la peligrosidad sin que eso suponga una autopista.
¿Un desdoblamiento es lo mismo que una autopista?
Es una autopista. Lo de desdoblamiento es un eufemismo. Que le llamen lo que quieran. Todo el mundo sabe lo que es. El ecologismo y las bases de Més están en contra. El alcalde de Campos y ex UM de Campos están a favor. Queda claro quiénes la defienden y por qué y quiénes están en contra y por qué. Los mismos que no han querido urbanizar es Trenc tampoco quieren esta autopista. Los que quieren destruir es Trenc también la quieren. Sabemos adónde conduce este modelo.
Antes ha hablado de estafa democrática por parte de los partidos del Pacto en este asunto, pero la autopista estaba en los Acords pel Canvi que firmaron en 2015 PSIB, Més y Podemos.
No hablaban de hacer una autopista. Hablaban de una intervención o un desdoblamiento. En los Acords pel Canvi también se decía que se revisaría el Plan Territorial de Mallorca y no se ha hecho. Un punto que no estaba es el segundo cinturón y se está ejecutando. Los Acords pel Canvi solo son sagrados cuando conviene. Se cumplen cuando se quiere y favorecen a según quién. No se habla de cómo se puede reducir la siniestralidad y el nivel de tránsito en esta carretera, solo se habla de la solución fácil que es hacer más carriles, más autopistas que a la larga implican más coches. Luego en el plan de movilidad que nos han presentado dicen que hay que poner tren, reducir los coches, sin calendario ni presupuesto.
¿Les parece un mal plan de movilidad?
No. Nos parece un buen plan. Es mejorable pero es una buena base para empezar a hablar. Pero es incoherente con estas otras decisiones del Pacto. Lo lógico es hacer primero un plan de movilidad y luego hacer las infraestructuras adecuadas para cumplir con sus objetivos. Aquí lo hacemos al revés. Primero hacemos unas carreteras desmesuradas que favorecen el incremento de coches y luego hacen un plan de movilidad para resolver los problemas que nos han provocado estas infraestructuras. No tiene ni pies ni cabeza.
¿El Pacto les ha fallado?
En materia de carreteras, sí. En otras, no tanto. Ha habido puntos de desencuentro, pero en general hemos tenido un diálogo fluido con casi todas las administraciones. A algunos responsables les hemos ayudado a sacar proyectos importantes, como el decreto de posidonia. Con otros hemos chocado más. Con la conselleria de Turismo, en el primer tramo de la legislatura con Biel Barceló como conseller, las relaciones no fueron fluidas. En esta segunda etapa, con Bel Busquets, el diálogo es mas fluido y hay cosas que valoramos positivamente, pero la política turística necesita un golpe de timón más profundo que el que se ha hecho. Con el Ayuntamiento de Palma sí ha habido un buen diálogo y valoramos positivamente sus políticas tanto de urbanismo como de medio ambiente. En el Consell, sobre todo en materia de carreteras y territorial, no hemos visto un cambio sustancial.
Es decir, en el Consell ha sido donde el Pacto más les ha decepcionado
En el Consell lo pueden vestir como quieran, pero no hay diferencia en la política de movilidad del Pacto de la que hizo el PP. De hecho, está peor que con María Salom. Números cantan. Se han desarrollado más infraestructuras agresivas en esta legislatura que en la anterior.
¿Y el PIAT?
Tampoco responde a las políticas que esperábamos. Estamos en un proceso de colonización turística de todo Mallorca y el PIAT, en vez de controlarlo, lo extiende. Los mismos partidos aprueban una zonificación muy restrictiva en Palma y en el Consell todo lo contrario, de modo que no es una cuestión de color político, sino de coherencia política.
¿El Pacto se arriesga a perder votos, en especial Més, por esta política a poco menos de nueve meses de las elecciones?
No lo sé. Debería preguntarle a la gente preocupada por eso. Yo lo que creo es que el que esté preocupado por el medio ambiente y el territorio de Mallorca, lo que ha de hacer es ayudar al ecologismo social, que se el que en estos 45 años ha puesto el debate medioambiental en la agenda política. Si en Mallorca, a pesar de los muchos problemas que hay, aún queda algún territorio protegido no ha sido por la intervención de las instituciones, sino porque ha habido una fuerza social capaz de contener según qué embestidas. Si el Pacto esta preocupado por esta deriva, lo que ha de hacer es rectificar.
¿Por qué el GOB se enfrentó a Biel Barceló?
Las relaciones no fueron tan fluidas como era de esperar. Ni las políticas cumplieron las expectativas. Fue un error no hacer una moratoria turística cuando se estaba tramitando la reforma de la Ley Turística. El número de plazas ha crecido de manera brutal, irreflexiva. La conselleria no quiso actuar en su momento ni tampoco ha querido actuar a tiempo ante la saturación turística. No era eso lo que esperábamos.
Así que para el GOB el Pacto también ha fracasado en esta materia.
No sé qué expectativas tenían, pero lo que sí se es que han quedado por debajo de nuestras expectativas. Con mucha diferencia. Tenemos una oportunidad histórica para empezar a girar el timón. Pero de aquí a diez años nadie recordará esta legislatura del Pacto. No quedará nada que realmente haya marcado un cambio de rumbo. Y no sabemos si se repetirá una oportunidad como esta.
¿No ve nada positivo?
Claro que sí. Han salido cosas positivas. Por ejemplo, con la conselleria de Medio Ambiente no hay color con lo que fue con Biel Company. No ha habido nadie tan nefasto al frente de Medio Ambiente como Company. Pero en general las expectativas eran muy altas y no las han cumplido. Y en el caso del Consell ni han comenzado. Lo que es seguro es que el Medio Ambiente no era la máxima prioridad del Pacto. Pedimos que en el nuevo Pacto en 2019 sea una prioridad. Que la línea de las actuaciones sea la que sale en las leyes de cambio climático o en la de residuos, en el decreto de posidonia o la que marca el ayuntamiento de Palma.
Si gana el Pacto. Si gana el PP ¿se irán de vacaciones como dice Ensenyat?
Bueno, la última vez que estuvo el PP yo pasé una tarde de vacaciones en el calabozo y luego en los juzgados. Cuando vino Bauzá a Bunyola, fui uno de los cuatro detenidos. Espero que el PP no salga. Company es nefasto. Pero si sale, el GOB estará donde siempre, pensando en Mallorca.
Sobre esta mesa tiene una pegatina que pone ´Dear tourist: Your luxury become my misery"
No es del GOB. Alguien las ha dejado por aquí, porque al local viene mucha gente.
¿Si fuera del GOB estaría de acuerdo?
No. El responsable del problema no es el turista que viene aquí de vacaciones, familias trabajadoras del norte de Europa que quiere disfrutar del sol que en su país no ven nunca... El problema no son ellos. Es el modelo de explotación del territorio, de la economía turística. Claro que quiero que haya turismo, pero lo que no podemos es tener 17 millones de turistas al año en un territorio tan limitado.
¿Alguna vez el GOB se llevará bien con los hoteleros?
Si no me equivoco ya han alegado contra la ley de Residuos. ¿Cómo vamos a llevarnos bien con una gente que no quiere que se prohíban plásticos, que es de sentido común? En Mallorca hay unos debates que en el resto del mundo están superados. El día en el que se actualicen y se pongan al nivel del resto del mundo, quizá podamos llevarnos mejor.
Hizo en twitter propaganda de una camiseta gallega que decía "si no me entiendes, largate". Lo más suave que le dijeron fue xenófobo.
No lo soy. No lo acepto, es una difamación. La xenofobia en todo caso es la persona que ante alguien que quiere vivir en su territorio utilizando con normalidad su lengua, le dice que no le quiere entender. Si no quieres entender, el que tienes el problema eres tú, eres tú el xenófobo, no yo.
Es musicólogo. ¿Qué banda sonora le pondría a la Mallorca actual?
Una cacofonía muy desafinada. Necesita un director de orquesta que la afine. Es un desbarajuste a nivel social, urbanístico, ecológico... Estamos llegando a una situación límite insostenible. O actuamos para arreglarlo o el tiempo nos pasara por encima.
