Magdalena Gacías, supervisora de enfermería del servicio de Medicina Preventiva de Son Espases, prefiere hablar de higiene antes que de lavado de manos ya que, al profesional sanitario que atiende a pacientes, se le recomienda que se las desinfecte con una solución hidroalcohólica preferiblemente a que se las lave con agua y jabón de la manera tradicional.
"Porque hacerlo así es más efectivo, más práctico y cuida mejor la piel de unos profesionales que deben realizar esta acción a menudo dentro de su jornada laboral", argumenta la diferencia.
Gacías ofreció ayer una charla en Son Espases sobre la importancia de la higiene de manos en las personas que cuidan a personas ya que, recalca, "está demostrado que las manos de los profesionales sanitarios son la principal vía de trasmisión de microorganismos en los hospitales".
Y esta afirmación es aplicable tanto a los hospitales del llamado mundo desarrollado como a los centros sanitarios de los países en vías de desarrollo.
Esta profesional explica que esta higiene es necesaria hasta en cinco momentos de la asistencia a pacientes, tal y como recomienda la Organización Mundial de la Salud. "Hay que limpiarse las manos en primer lugar antes de entrar en contacto con el enfermo", comienza, "antes de cualquier tarea aséptica como puede ser colocar un catéter o una sonda; después de un riesgo de contacto con fluidos biológicos como un cambio de pañal; tras asistir al enfermo para evitar trasmitir agentes infecciosos a un carro de comida, por ejemplo, y, por último, después del contacto con el entorno del paciente (sus sábanas, su cama)", completa.
Gacías subraya que es importante recordar a los profesionales sanitarios la importancia de una higiene de manos que se minusvaloró con el uso generalizado de los guantes coincidiendo con los años más virulentos de la epidemia del Sida en la década de los ochenta.
Y para el resto de la ciudadanía, sin querer caer en alarmismos, recomienda recuperar el viejo hábito de lavarse las manos. "Creo que desde Atención Primaria se imparte formación en las escuelas para inculcar a los niños que hay que lavarse las manos antes de comer, después de ir al baño y cuando tenemos contacto con alguien enfermo en casa como la medida más efectiva para evitar diarreas, catarros o gripes", concluye esta profesional.
