Marc Edward Cameron y su hermana Kristy, hermanos a su vez de Laura Cameron, la principal implicada en las supuestas estafas a los hoteles con falsas intoxicaciones alimenticias, se desvincularon ayer ante la jueza con dichas prácticas. Marc Edward, responsabilizó, al igual que su hermana Laura, de las estafas a los bufetes de abogados y empresas de reclamaciones de consumo británicas, a las que la familia suministró durante unos meses datos personales de turistas británicos en Mallorca.

Los dos hermanos declararon por la mañana en el juzgado de instrucción 2 de Palma, que investiga estas presuntas estafas que causaron en los últimos años más de sesenta millones de euros de pérdidas a hoteleros de toda España, especialmente de Mallorca.

Kristy apenas depuso durante unos minutos, en los que explicó que no participó en los negocios familiares de captación de datos de turistas y que trabaja para una empresa ajena al núcleo y dedicada a eventos y relaciones públicas.

Según Marc Edward, las empresas de la familia Cameron solo se dedicaron a captar datos de turistas británicos que pasaban sus vacaciones en Mallorca para vendérselos a empresas de marketing y bufetes de reclamaciones en Gran Bretaña, pero no les animaron a engañar a sus touroperadores y hoteles de todo incluido.

Ayer estaban citados siete investigados, pero solo se presentaron tres, entre ellos una tiquetera, sospechosa de captar a turistas británicos en las puertas de sus hoteles. Esta mujer, de origen británico, se acogió ayer a su derecho a no declarar puesto que su abogada de oficio no había podido leerse el voluminoso sumario.

La Guardia Civil desmanteló en 2017 la presunta trama mallorquina de esta red, que habría causado decenas de millones de euros de pérdidas a los hoteles. Desde que, en septiembre del año pasado, se desató la Operación Claims no se ha producido en Balears ningún caso de presunta estafa. La familia Cameron asegura que respetó las normas de protección de datos en la recopilación entre los turistas y creó una aplicación específica para estos trabajos. Laura Cameron no ha obtenido permiso judicial para ir a la boda de su hermana en Inglaterra.