Balears ha reducido su índice de accidentes laborales durante el primer semestre de 2018 por primera vez en seis años, con un recorte que ha sido especialmente intenso en dos de los sectores que más empleo generan, como son la hostelería y la construcción, según los datos facilitados ayer por el conseller y la directora general de Trabajo, Iago Negueruela e Isabel Castro respectivamente. Pese a ello, las islas siguen teniendo la tasa de siniestralidad más alta de España, lo que explica que a partir de octubre se vaya a poner en marcha una nueva campaña de control sobre la construcción y para 2019 se esté preparando un aumento de las inspecciones en materia de seguridad laboral.

Un dato a tener en cuenta es que el índice de siniestralidad tiene en cuenta el número de accidentes laborales en relación a la cifra de trabajadores de alta en la Seguridad Social, y en este caso la bajada se cifra en un 5,6%. Pero pese al aumento del empleo (está en máximos históricos), en las islas bajan también las cifras absolutas de accidentes durante esos primeros seis meses, al pasar de los 9.577 de 2017 a los 9.412 del presente año.

La reducción más importante se ha dado en los siniestros de carácter leve, que son los que provocan que Balears sea la autonomía con los peores índices de toda España. En cifras absolutas, éstos han pasado de los 9.524 del pasado ejercicio a los 9.354 de presente. En los graves se ha dado una subida, al pasar de 50 a 53, los muy graves se mantienen sin cambios con un solo caso, y los mortales crecen de tres a cuatro. De estos últimos, dos corresponden al sector de la construcción, uno a la industria, y el cuarto no está vinculado a causas materiales del puesto de trabajo, dado que vino dado por un infarto.

Por lo que respecta al índice de siniestralidad (accidentes en relación a la cifra de trabajadores), la bajada general ha sido de un 5,6%, pero este recorte alcanza el 9,6% en la construcción, el 8,2% en la hostelería, otro 8,2% en la industria, un 3,8% en el conjunto del sector servicios, y solo sube en la agricultura en un 21,3%.

Por islas, el descenso en Mallorca es de un 5,7%, del 2,3% en Menorca, del 6,5% en Eivissa, y se da una subida del 20,1% en Formentera.

Un dato que se destaca es que la mejoría que se ha dado en la calidad del empleo balear, con más contratos indefinidos, es un factor que ha influido en la bajada de los accidentes, dado que la mayoría se producen cuando el asalariado lleva en su puesto entre seis días y tres meses.

Pese a destacar el carácter positivo de este descenso por lo que supone de cambio de tendencia, el conseller no ocultó que la situación balear sigue siendo negativa, por tratarse de la autonomía con el índice de siniestralidad más alto de España, de ahí que insistiera en que no se va a bajar la guardia, y que se van a intensificar las campañas de vigilancia. En este aspecto, agradeció la colaboración que en relación a este tema están prestando los sindicatos, las patronales sectoriales y las fundaciones de la construcción y de la hostelería. También puso en valor la próxima puesta en marcha del Instituto Balear de Seguridad y Salud Laboral.

Reacción empresarial

Tras hacerse públicos estos datos, desde la Asociación de Constructores de Balears se expresó su satisfacción por el descenso de la siniestralidad conseguido en este sector y se destacó el esfuerzo realizado para conseguirlo.

Pese a ello, su presidente, Eduardo López, reconoció también que el índice sigue siendo demasiado alto y coincidió en la necesidad de seguir trabajando en esta materia.