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El tiempo es relativo en el Parlament

Govern y oposición llevan todos sus debates a si los nueve meses que quedan antes de las elecciones serán suficientes para que el Pacto cumpla sus promesas: "queda legislatura" contra "esto se acaba"

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Pleno del Parlament 11 de septiembre de 2018

El presidente del Parlament, Baltasar Picornell, Balti, como se le conoce en círculos políticos, dio ayer tres cuartos de hora de receso durante el pleno para que los diputados pudieran ir a comer y proseguir por la tarde. Los diputados se sorprendieron. Normalmente los recesos alcanzan la hora. El portavoz de Ciudadanos, Xavier PericayTres cuartos de hora después, sólo cinco diputados, además del presidente del Parlament, habían regresado al hemiciclo. Al final, los cuarenta y cinco minutos se convirtieron en una hora. Fue la última prueba de que el tiempo es relativo. Ayer, más que nunca en el Parlament.

Fue el primer pleno del último periodo de la legislatura. Para el Govern todavía quedan nueve meses, mientras que para la oposición ya sólo quedan nueve meses. Parece que es lo mismo, pero no. En ese matiz va que unos contesten que "todavía queda legislatura" mientras los otros ya les avisan que "esto se acaba". Es el tiempo de descuento en el que unos piden la hora mientras los otros buscan un último gol: llámese gratuidad del aparcamiento de Son Espases, llámese reducir barracones, llámese nuevas infraestructuras hidráulicas, llámese Régimen Especial para Balears.

Para el PP, "la legislatura acabará sin que el Pacto haya cumplido con su promesa de reducir barracones. Para el conseller Martí March "todavía queda legislatura". Para el PP, si Francina Armengol no anuncia el martes un acuerdo sobre el REB, ya no lo habrá esta legislatura. Para la consellera Catalina Cladera, "todavía queda legislatura" para el REB. Las instalaciones hidráulicas son un problema "histórico" para Armengol; de "hace doce años", para el portavoz de El Pi, Jaume Font.

El tiempo siempre se hace más largo para unos que para otros y el pleno de ayer, de 10 horas, debió hacerse largo especialmente para la exdiputada de Podemos, Montse Seijas, todo el tiempo de pie en su protesta para que le cambien al escaño que reclama.

Y del tiempo a la distancia. La diputada por Formentera, Silvia Tur, volvió a participar telemáticamente en las votaciones del pleno. Mientras, tres diputados, la popular Núria Riera, el socialista Enric Casanova y el ecosoberanista menorquín Nel Martí, estaban en el Congreso de los Diputados defendiendo la protección del deporte base en la ley de emprendedores. Si bien el menorquín aseguró en sus redes que ayer "tenía su corazón con Cataluña y su Diana Nacional".

"Más que nunca hay que gritar libertad presos políticos y exiliados", compartió en sus redes con el pin del lazo amarillo, que volvieron a llevar ayer en el pleno todos los diputados de Més y que criticaron desde el PP.

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