Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Es usted famoso?"

Para los jóvenes, sí. Niños de seis años que van con sus madres me paran por la calle para pedirme una foto. La edad media de mis seguidores está entre los doce y los 16.

¿No estará grabando esta entrevista?

No soy obsesivo. Intento administrarme, llevarlo de la forma más normal posible y que no influya en mi vida personal. La gente en mi sector está muy pendiente de la evolución de sus cifras con lo que, si flojeas, te afecta. Yo disfruto de hacer lo que me gusta.

¿'Youtube' le da más dinero que el Ferriolense?

Sí, se puede vivir y vivo de mis vídeos, que están monetizados. Cuando entras, te salta un anuncio, y las analíticas miden las visitas mensuales para que sepas lo que has ganado. Jugar en Tercera es un extra.

Los 'youtubers' no se lesionan.

Se lesionan. Lo he pasado mal con mis problemas de espalda, que me perjudican en la grabación y en el fútbol. Me tengo que cuidar por partida doble.

¿La naturalidad se la da la cámara, o siempre es así?

Cuando estoy delante de la cámara, intento poner más énfasis en todo. Soy natural, pero con un toque de emoción que enganche al espectador. Lo he aprendido solo, con la práctica, me da vergüenza repasar mi primer vídeo. No somos actores, somos gente normal.

¿Qué diablos es Clash Royale?

Me lancé con Clash Royale, un juego de estrategia de móvil. Subía vídeos jugando y tuvo mucho éxito, así que empecé a montar retos en la calle más entretenidos. Tras unos meses sin subir contenidos, mi objetivo ahora es enfocarlos hacia el deporte.

¿Desviará a sus seguidores a las apuestas deportivas?

Somos personas influyentes y hemos de asumir nuestra responsabilidad, por lo que desde mi perspectiva no sería correcto. Les enfocaría hacia otro ámbito más sano. Dije que no a una red de contactos, somos como alguien de la tele que hace anuncios.

O sea, que quiere acabar con los periodistas.

Es un concepto muy moderno, somos los famosos de la tele actualizados. Es un nuevo medio.

Si recomienda unas botas a su millón de seguidores, las compran.

Así es. Aunqué esté en desacuerdo, no vende el que mejor lo hace, sino el que mejor lo promociona.

Muchos jugadores de Primera suspirarían por su cifra de seguidores en redes.

No me puedo comparar con los jugadores del Madrid o Barça, pero tengo más seguidores que los de Betis o Sevilla. Un amigo me decía que "a ver si ahora te van a fichar por tu repercusión en redes".

¿Lo aceptaría?

Quiero que me contraten por mi valía. Cuando entreno, me olvido de todo lo demás y me concentro en mi rendimiento deportivo. Ahora bien, preferiría jugar en Primera a mi millón de seguidores en Youtube.

Usted no estudia Económicas, las practica.

He sido emprendedor y he aprendido más en Youtube que trabajando. Pero quiero destacar que estudiar una carrera me ha ayudado a enfocar el canal y su contenido.

¿Ha ido alguna vez al cine?

Correcto. Soy un fanático del cine, me apasiona el cómo se hacen las películas y aprendo muchas cosas que intento reflejar en la calidad de mis vídeos, para que sea mas alta que la media de los youtubers.

Lo intenta, pero no es usted tan guapo como Miquel Àngel Moyà.

Es un portero muy curro, mi referente cuando era pequeño. Siempre he sido de Casillas, pero me parezco más a Asenjo. Si te refieres a mis suscriptoras, son un diez por ciento del total por el contenido de mis vídeos, pero alguna he encontrado.

'Influencer' es un poco más digno que 'DJ'.

Pues no sé qué decirte, los dos me parecen dignos. Se trata de escoger algo que te enorgullece y que haces bien. Empecé como un hobby, me daba hasta apuro y mis amigos se reían de mí. Ahora soy yo quien les dice, "¿te acuerdas de cuando te reías?"

¿Lo sabemos todo de usted?

No, la gente famosa enseña lo que quiere enseñar. Mi intimidad podría sorprender a alguien, porque me gusta leer, escribo poesía, querría tocar el piano y pintar cuadros.

¿Cuál es su techo?

No pienso en cifras, me gustaría inspirar, motivar y transmitir valores con el coaching. En fútbol, por qué no jugar en Segunda. Soy muy competitivo.