Camille rellenaba con sus datos las tarjetas identificatorias para sus maletas mientras hacía malabares sujetando la ensaimada que se llevaba para Francia. Dejaba ayer la isla tras dos meses trabajando como au pair, contenta con la experiencia y deseando volver a Mallorca, pero de vacaciones.

A pocos metros de ahí, en el mostrador de Easy Jest la familia formada por Chris, Christine y sus dos hijos esperaban para facturar sus maletas tras una semana en Camp de Mar. Les tocaba volver ya porque el martes los colegios ingleses ya abren sus puertas. Les habían avisado de que el vuelo saldría con 20 minutos de retraso: "No pasa nada, supongo que es normal", aseguraba él con buen humor.

Como ellos, muchas familias inglesas circulaban ayer por Son Sant Joan, dispuestos (algunos con más resignación y otros con menos) a coger el avión que les llevaría de vuelta a la realidad.

Aunque ayer seguían llegando los turistas que eligen septiembre como mes de asueto, el último fin de semana de agosto, el mes vacacional por excelencia, es la principal Operación Retorno del verano.

Según los datos facilitados por AENA, entre el viernes y el lunes van a pasar por los aeropuertos de Balears casi un millón de pasajeros (943.601) en un total de 5.922 vuelos. En el aeropuerto palmesano solo ayer se registraron un millar de trayectos, con casi 183.000 pasajeros a bordo. No hubo incidencias, más allá de los retrasos habituales en una jornada de tanta actividad como la de un final de agosto, según indicaron fuentes aeroportuarias.

Trabajadores de Son Sant Joan razonaban ayer a este diario que ven con alivio la llegada de septiembre ya que supone el principio del fin de la temporada. Saben que les quedan aún dos semanitas de bastante movimiento, pero a partir de mediados de mes el globo se va desinflando.

Un trabajador veterano del aeropuerto explicaba que ésta ha sido una temporada intensa (con muchas jornadas de retrasos y cancelaciones por las huelgas de controladores franceses; la de Ryanair; los problemas de Vueling; o las desviaciones de vuelos causadas por las tormentas de hace dos semanas), pero que aún así la percepción generalizada, según ha comentado con otros compañeros, es que ha habido menos movimiento que otros años. Una mujer responsable de la limpieza disentía sin embargo: "Yo he visto muchísima gente, vamos a tope".

¿Es una realidad la caída de movimientos o una percepción? Los datos globales de este fin de semana para todos los aeropuertos de las islas desde luego sí registran una bajada (con 1.177 vuelos y 194.000 pasajeros menos) en comparación con el mismo fin de semana del año pasado.