El Govern abrirá mañana el plazo de dos meses para solicitar ayudas al alquiler de vivienda para este año, con efectos retroactivos al 1 de enero. A ellas podrán acogerse las familias y jóvenes con recursos insuficientes para hacer frente al pago de viviendas cuyo precio de alquiler sea de un máximo de 900 euros para toda la Comunidad Autónoma, a diferencia del pasado año en el que este límite solo se aplicaba en Eivissa y Formentera, mientras que para el resto de las islas era de 600 euros.

Así lo explicó ayer el conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, quien resaltó que para este año se destinarán 7,4 millones de euros para estas ayudas, de los cuales 6 millones serán fondos estatales, frente a los 4,7 millones que se dedicaron el pasado año. El Govern prevé que estas subvenciones lleguen a más de 3.000 hogares de las islas, que deberán tener un contrato de alquiler en vigor este año para optar a ellas.

Las condiciones para acceder a las ayudas son, como criterio general, disponer de unos ingresos anuales inferiores a 22.558 euros y que el alquiler de la vivienda sea de un máximo de 900 euros mensuales, en cuyo caso la ayuda será del 40 por ciento, hasta un máximo de 4.000 euros anuales, es decir, 330 mensuales. En el caso de familias numerosas o con alguno de sus miembros discapacitados, los ingresos anuales para acceder a las ayudas ascenderán a 30.077 euros, y si se trata de familia numerosa especial (más de cuatro hijos o con alguno de sus miembros con grado de discapacidad elevado) serán de 37.596 euros. Para jóvenes menores de 35 años y mayores de 65 años, alcanzarán hasta el 50 por ciento del alquiler, con un máximo de 4.300 euros al año.

Pons defendió el "esfuerzo" en la presente legislatura para afrontar el problema del acceso a la vivienda en las islas desde "distintos frentes" y resaltó que para este año "se multiplican por cinco los fondos destinados a ayudas de alquiler de 2015", último año en las que las gestionó el anterior Govern del PP que destinó 1,4 millones de euros con los que recibieron ayudas 730 personas.

En este sentido, recordó varias de las iniciativas adoptadas en esta legislatura, en especial la aprobación de la primera Ley de Vivienda balear con una dotación presupuestaria de 88 millones de euros entre este año y 2020. Las medidas, según dijo, responden a la "preocupación" del Govern por el aumento del precio de la vivienda en las islas, incluido el del alquiler, y su "repercusión para las familias con menos recursos e incluso para las consideradas de nivel medio". Para Pons, el que Balears sea una zona atractiva para los europeos "tiene consecuencias sobre el precio de la vivienda".