Un total de 85 de las 374 personas aprobadas en las oposiciones a auxiliar administrativo del Govern, que deberán repetir la prueba de informática por decisión del Ejecutivo, han formulado recurso de alzada contra esa resolución, según fuentes próximas a los afectados. Los mismos medios han señalado que el Govern dispone de tres meses para pronunciarse sobre el recurso de alzada, pero todo parece indicar que las polémicas pruebas acabarán en los tribunales de lo contencioso-administrativo.

El número de recursos contra el acuerdo de repetir el examen de informática, que fue cuestionado por los opositores no aprobados, se eleva a 23, de los que uno de ellos está firmado por 63 afectados.

El tribunal de las oposiciones al cuerpo auxiliar del Govern decidió a finales del pasado mes de junio, y después de haber salido ya los resultados provisionales, anular la prueba informática después de tener que retirar seis de las treinta preguntas que se formularon entre los tres turnos de la prueba. La decisión llegó tras presentarse 173 alegaciones de opositores suspendidos, si bien sólo siete motivaron la suspensión. A partir de ahí, quienes se han movilizado son los 374 opositores aprobados, que rechazan tener que repetir ahora la prueba.

Hace unos días se cerró el periodo para recurrir la decisión del tribunal de suspender el examen. En total se han presentado 23 recursos, detrás de los que hay hasta 85 opositores. El que aglutina a más está secundado por 63 y es el que representan Elena González, María del Mar Rincón, Sara Apezteguia, Ana Ruano, Catalina Sánchez y Juana María Barquero, todas ellas aprobadas y ahora ya preparando de nuevo una prueba que, si el Govern no cambia de parecer, deberán repetir dentro de cinco meses.

Postura del Govern

El Govern mantiene que los 374 aprobados en la prueba informática al cuerpo auxiliar de la Comunidad deberán repetir el examen. Pese a que la consellera de Hacienda, Catalina Cladera, pidió el pasado 26 de julio disculpas a los afectados por "un error que no tendría que haber pasado" y evitó adelantar cómo lo resolverá su Conselleria. "Hemos de mejorar los procesos futuros, pero eso no libera ni consuela de que se tenga que repetir el examen", advirtió la consellera.

El tribunal de las oposiciones decidió en junio anular las pruebas después de tener que retirar seis de las treinta preguntas que se formularon en los tres turnos de la prueba por defectos en su formulación. La anulación llegó después de que se presentaran 173 alegaciones por parte de opositores que habían suspendido. A partir de ahí, quienes se empezaron a movilizar fueron los 374 opositores aprobados, que rechazan tener que repetir la prueba.

Caos en las oposiciones

La consellera de Hacienda, Catalina Cladera, compareció el 26 de julio en el Parlament para dar explicaciones sobre lo que el PP calificó de "caos en las oposiciones". La consellera empezó su intervención pidiendo "disculpas a la gente afectada" y asumiendo "un error que no tendría que haber pasado y que no tiene que volver a pasar". Cladera trató de explicar los fallos en la prueba en la falta de "rodaje" después de más de una década sin convocarse oposiciones en el archipiélago.

Sin embargo, pese a asumir el error y disculparse con los aprobados, Cladera se limitó a manifestar su "respeto a la autonomía y soberanía del tribunal". "Me sabe mal el error y entiendo que no es plato de buen gusto repetir el examen", lamentó la consellera de Hacienda que, no obstante, no planteó, por ahora, otra salida a los opositores aprobados, que planean acudir a los tribunales.