Una veintena de mallorquines que se encuentran en Milán se quedaron la noche del jueves sin poder regresar a Palma por la cancelación de un vuelo de la compañía aérea Easyjet, que debía salir del aeropuerto Malpensa de la ciudad italiana a las 20.30 horas.

Los afectados aseguran que la aerolínea solo les ha ofrecido asientos en otro vuelo para el próximo 16 de agosto. Por ello, muchos de ellos han tenido que comprar billetes en otras compañías con precios mucho más elevados.

Miquel Àngel Julià y Maria Antònia Oneto es una pareja de Porreres que iba a coger el vuelo EZY2747 y cuando estaban a punto de subir al avión les comunicaron que se cancelaba el viaje por "exceso de equipaje y problemas internos de la empresa". Sin embargo, según relatan, una azafata les comentó que el motivo real de la cancelación era que la tripulación del Airbus había decidido abandonar su puesto de trabajo por el exceso de horas acumuladas.

Oneto asegura que se produjeron momentos de tensión porque además de los mallorquines, muchos italianos y suizos se quedaron sin sus vacaciones a la isla. El nerviosismo y el enfado terminó con la intervención de los carabinieri en la terminal 2 del aeropuerto de Malpensa. Además, la cancelación del viaje de regreso a la isla fue el colofón de una serie de problemas técnicos que se produjeron antes del fallido embarque. Estuvieron una hora sin corriente eléctrica delante de los mostradores que anunciaban cancelaciones y retrasos.

La pareja mallorquina ha tenido que adquirir billetes en otra compañía que les ha costado 995 euros para poder regresar a Mallorca. Aseguran que pondrán una reclamación ante Easyjet por los gastos ocasionados ya que tuvieron que buscar un hotel para alojarse durante la noche del jueves y la aerolínea únicamente se compromete a reembolsarles 330 euros. "Nos sentimos indefensos e impotentes frente a las compañías", sostiene Miquel Àngel Julià.