La mayoría de los trabajadores de la unidad de larga estancia Alfàbia del hospital Psiquiátrico, departamento donde están ingresados en estos momentos 23 pacientes con enfermedades mentales graves, algunos de ellos desde hace más de diez años, han dicho basta y han hecho público que este edificio, antiguo, obsoleto y pendiente de una reforma, carece de aire acondicionado en la primera planta donde descansan los enfermos. Unas dependencias expuestas todo el día al sol donde han llegado a registrarse temperaturas de 35 grados en estos días de canícula estival.

Una circunstancia que aseguran que ya fue denunciada por escrito a la gerencia de Son Espases, centro al que está adscrito y del que depende el Psiquiátrico, en julio de 2015, hace ahora más de tres años, sin que se haya hecho nada para solucionarlo.

Además, alertan de que "con estas altas temperaturas, los pacientes están más irritables y agresivos" lo que supone un plus de peligrosidad tanto para los propios enfermos, por agresiones mutuas, como para el personal que les atiende.

Los empleados denuncian que la situación es especialmente insoportable en la primera planta del edificio, donde cada día duermen los pacientes y que carece totalmente de aparatos de aire acondicionado. "Suben en torno a las diez y media u once de la noche y bajan a desayunar a las nueve de la mañana. Esa planta es un horno porque le ha estado pegando el sol todo el día y los pacientes no pueden salir de ella. Tiene ventanas enrejadas y pueden deambular por el pasillo e ir de una habitación a otro, pero no salir de ella", explica uno de ellos.

En un comunicado lanzado inicialmente por la delegada del STEI-i al que sumaron más tarde, indignados, la mayoría de los 29 profesionales que trabajan en la unidad Alfàbia -22 auxiliares de enfermería, 5 enfermeros, un médico y un psicólogo-, se denuncia que en este primer piso pensado para acoger a los pacientes durante su descanso nocturno, se llegan a alcanzar los 35 grados de temperatura y que muchos pacientes, por el intenso calor, prefieren dormir en el suelo que sobre sus camas.

Y la indignación de los trabajadores la produjo fundamentalmente las declaraciones de Miguel Ángel Veny, subdirector de gestión de Son Espases, que indicó que ayer mismo por la mañana acudieron al Psiquiátrico varios técnicos de mantenimiento que, aseguró, habían arreglado el sistema de climatización.

Y no se quedó allí. Preguntado por las quejas de los empleados de que la primera planta donde "descansan" los pacientes carece de aparatos de aire acondicionado, el alto cargo responsable de las tareas de mantenimiento del área de Ponent no dudó en negarlo, afirmando categóricamente que "todo el edificio está climatizado".

Los trabajadores no daban crédito a estas declaraciones. "No hay ningún aparato de aire acondicionado, ni ventiladores ni climatización de ningún tipo en la primera planta de la unidad Alfàbia. En la planta baja, el aire funciona a medias en el salón donde pasan la mayor parte del día y sí hay climatización en el comedor. Nos arreglamos. El problema es en la planta dormitorio. Han venido varias veces técnicos de salud laboral a medir la temperatura, pero lo hacen por la mañana y yo les digo que lo hagan a las seis de la tarde, cuando está recalentada de todo el día", criticaba un empleado, que concluía contraponiendo que, cuando se avería el aire del despacho de algún directivo, "enseguida vienen a arreglarlo".