El arquitecto que ha diseñado la nueva marquesina de la Estación Intermodal de Palma, Joan Miquel Seguí, ha afirmado que la cubierta "tendría que ayudar a la disminución del vandalismo y los grafitis en esta parada", ya que en los últimos años han aparecido muchas acciones de ese tipo. El motivo reside en la iluminación, "uno de los mayores desafíos del diseño y que se ver''a como aumenta de manera natural". El otro gran ha sido la protección de la climatología de la estación", según el arquitecto.

La marquesina fue inaugurada ayer en la Intermodal por el conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, juntamente con la consellera de Presidencia Pilar Costa y el arquitecto del diseño, que explicó los tres puntos principales en la construcción de la cubierta.

Primeramente, tal y como cuenta el arquitecto, las escaleras para entrar en la estación de trenes se sitúan entre dos edificios catalogados. Por esta razón, se ha escogido el color blanco para las tejas de la marquesina, ya que este color "es el tradicional de los edificios ferroviarios de Mallorca".

En segundo lugar, anteriormente en la estación había un muro perimetral que "parecía que te bloqueaba la entrada y provocaba un cierto aislamiento", relató el arquitecto. Ahora, con la construcción de la nueva cubierta "hay más transparencia a la hora de comunicar la Intermodal con espacios como el Parc de ses Estacions, se tiene una sensación de mayor apertura cuando se entra".

Por último, se ha colocado una gran señal informativa "con la misma línea cromática" que la marquesina, ubicada unos metros por delante de la parada y que marca la entrada de la estación, ya que antes "el acceso a la Intermodal estaba un poco escondido por la ubicación de las escaleras".

Aunque el contrato de obras para la ejecución de la marquesina, según la web del Govern, en un principio se cifraba en poco más de 240 mil euros, el conseller Pons explicó ayer en la rueda de prensa que finalmente el coste ha sido de 210 mil euros en una obra que ha durado un total de seis meses.

Pons precisó que el diseño de la marquesina ha sido un "acierto total", además de ser "necesario para la Estación Intermodal". Además, coincidiendo con el arquitecto, afirmó que el tema de la iluminación era "el más complicado" de la cubierta, aunque se "ha resuelto perfectamente" dando "personalidad" al diseño.

Además, con esta estructura, prosiguió Pons, se ayuda a cumplir una de las medidas del acuerdo para el fomento de la igualdad y la lucha contra la violencia de género, ya que en ese acuerdo se establece que todas las estaciones deben estar iluminadas, y con la marquesina se verá aumentada la entrada de luz natural en la estación y se reduce, tal y como se ha dicho, la sensación de oscuridad y de clausura.

Tanto el conseller Pons como la consellera de presidencia Pilar Costa y el arquitecto de la marquesina se mostraron muy satisfechos ayer con el resultado final del diseño. "Es una cubierta contemporánea y muy respetuosa con los edificios que tiene alrededor", afirmó Seguí durante la inauguración.