El Consell se niega a entrar en una batalla judicial con el Govern. Los partidos del Pacto en la institución insular rechazaron ayer reclamar por la vía judicial 25 millones de euros que preveían recibir de más del Ejecutivo autonómico. El PP, que presentó la propuesta de llevar la reclamación a los tribunales, se quedó solo con Ciudadanos y El Pi. Los regionalistas alertaron de que los 25 millones menos ingresados pueden llegar a traducirse en “un agujero” en las cuentas de este año del Consell.

Según los cálculos del área de Hacienda de la institución insular, con la ley de financiación de los consells, debían llegar este año 125 millones de euros del Govern en concepto de devolución de adelantos, las famosas 'bestretes', desde 2008 a 2013 y reconocidos por el Ejecutivo autonómico.

Sin embargo, finalmente, tras ir a negociar el conseller insular de Hacienda, Cosme Bonet, con la también consellera de Hacienda, pero del Govern, Catalina Cladera -ambos del PSIB-, esa cantidad se vio rebajada por debajo de los 100 millones. En total, 97 millones.

En el pleno del Consell celebrado ayer, el PP presentó una moción con la que instó al gobierno insular a presentar un contencioso-administrativo contra el Govern por abonarle 25 millones menos, incumpliendo, según los populares, la Ley de financiación de los consells insulares. La iniciativa fue rechazada con los votos de los tres partidos de izquierdas, PSIB, Més y Podemos y el PP se quedó solo con el apoyo de Pi y Cs.

"Hablamos de un tema no resuelto por una ley de 2014, cuando si no recuerdo mal creo que gobernaba José Ramón Bauzá", reprochó el conseller de Hacienda, Cosme Bonet, al PP, asegurando que la ley acaba diciendo que "el Govern podrá hacer lo que quiera". Por ello, el socialista puso en valor los 100 millones pactados y apuntó que ir a los tribunales "sería volver a la casilla de salida, no recibir los 100 millones, e iniciar una batalla legal sin saber si ganaremos". "Más vale un mal acuerdo, y en este caso no es malo, que un buen pleito", defendió el conseller.

"Un mal acuerdo no, un acuerdo nefasto", recriminó desde el PP Margalida Roig, recordándole que "hace tres años que el Pacto tiene mayoría absoluta en el Parlament para cambiar la ley si ese es el problema". Igual de vehemente fue el portavoz del Pi en el Consell, Antoni Pastor. "Usted no es nadie para perdonar la deuda del Govern con esta institución", le recriminó. "La consellera Cladera cada vez le fastidia y usted sale contento", criticó Pastor, que acabó acusando a Bonet de "ser el monaguillo de Armengol como María Salom lo era de Bauzá".

El regionalista también alertó de que si había 125 millones presupuestados y solo llegan 100, habrá "un agujero" en las cuentas de 25 millones. Bonet lo negó y aseguró que "las previsiones ya están hechas y el agujero está cubierto".

Pi y Més piden concierto

Sobre la financiación pero del Govern presentó una moción El Pi, en la que trató de forzar al PSIB a pedir reformar el sistema a Pedro Sánchez ahora que ha anunciado que no hay tiempo. La negativa de Pastor a votar por separado un punto en el que defendía el concierto económico para Balears dejó al Pi solo con Més apoyando la propuesta. El PSIB se abstuvo.