Javier Rodrigo de Santos, exteniente de alcalde y exconcejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma, condenado en 2010 por varios delitos de abusos sexuales a menores, vuelve a ser investigado por un juzgado por, presuntamente, haber abusado de dos presos en tercer grado que habían cumplido condena en una prisión de Madrid.

Estos presos, con uno de ellos no llegó a tener relaciones sexuales pese a que el político del PP supuestamente lo intentó, lo denunciaron hace seis meses ante la Policía, desveló ayer el periódico digital eldiario.es.

De Santos fue detenido en diciembre y cuando estuvo ante el juez, además de negar los hechos, atribuyó las denuncias a una venganza porque había redactado un informe negativo sobre estas personas, según señalaron ayer fuentes próximas al implicado.

Tras la detención policial, la fiscalía solicitó su ingreso en prisión. Sin embargo, el juez del juzgado de instrucción número 42 de Madrid, que tramita la denuncia, rechazó la propuesta del fiscal, pero le impuso medidas cautelares: una orden de alejamiento para que Javier Rodrigo de Santos no pudiera acercarse a las víctimas a menos de 500 metros.

Poco tiempo después de que el exregidor saliera de la prisión de Palma, tras cumplir una condena de siete años, abandonó la isla y se trasladó a Madrid.

Entonces fue contratado por la ONG que creó en la capital el religioso Jaime Garralda, llamada Horizontes Abiertos.

Se trata de una organización ultracatólica que se dedica a dar asistencia a los presos para ayudarles a rehacer sus vidas. Da cobijo a estos reclusos cuando inician el periodo de tercer grado.

La Policía recibió la denuncia de un preso de origen sudamericano que quedó bajo la custodia de la organización religiosa. El recluso, condenado a seis años por tráfico de drogas, contó a la Policía, y más tarde al juez, que el expolítico del PP le coaccionó con presentar informes negativos contra él, lo que le habría supuesto la suspensión del tercer grado, si no se sometía a sus deseos sexuales.

El joven de 29 años reconoció que había tenido relaciones con el responsable de la organización en una decena de ocasiones, en uno de los pisos que tutela la ONG religiosa. Sin embargo, Rodrigo de Santos explicó al juez que, en efecto, había presentado un informe negativo sobre este recluso, de ahí que atribuyera la denuncia presentada contra él como una venganza.

A pesar de negar los hechos, no fue el único recluso de la cárcel que implicó a Rodrigo de Santos en prácticas sexuales no consentidas.

Una semana después de que le denunciara el recluso, otro preso acudió a la Policía para relatar otro episodio sexual que implicaba al exconcejal de Palma.

Se trataba de un preso marroquí que también fue acogido por la fundación Horizontes Abiertos. Contó que De Santos le invitó varias veces a un piso que tiene la organización en Alcobendas. Parece ser que empezó a seducirle tocándole sus partes íntimas y, como el preso reaccionó rechazando su propuesta sexual, De Santos le coaccionó amenazándol con firmar un informe negativo sobre él, lo que supondría su regreso a prisión.

A pesar de estas presiones, según el recluso marroquí, no aceptó tener relaciones con Rodrigo de Santos. En su declaración, el preso aportó unos mensajes con el expolítico que le podrían comprometer en un futuro, según detallaba la información de "eldiario.es".

La Policía cuenta con un tercer testigo. Se trata de otro de los presos atendidos por la ONG, que señaló que conocía el acoso al que sometía el monitor a los internos para satisfacer sus deseos sexuales.

La organización humanitaria que creó el padre Garralda, fallecida hace unos meses, está dirigida por un patronato que gestiona las subvenciones que recibe para financiar su actividad con los reclusos.

Los fondos se obtienen a través de diferentes proyectos. La mayor parte de integrantes de este patronato están directamente relacionados con el PP. Javier Rodrigo de Santos llegó a la organización como voluntario y más tarde fue contratado. Era el director del proyecto de asistencia a los reclusos. Esta doble denuncia sexual provocó la dimisión de la presidenta de esta organización religiosa.