Los ciudadanos de las islas ya pueden retirar los fármacos que tengan prescritos en su receta electrónica en cualquier farmacia de las 14 autonomías del país que han adecuado sus sistemas para poder leerlas, todas excepto las de Madrid y Andalucía y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, reveló ayer la consellera de Salud, Patricia Gómez, en una rueda de prensa a la que acudió con el director general del Servei de Salut, Juli Fuster, y el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Balears (COFIB), Antoni Real.

Gómez se congratuló de lo que calificó como "retorno" de derechos a los ciudadanos de las islas que, recalcó, evitará "tener que hacer acopio de medicamentos antes de irse de vacaciones y acumular un exceso de fármacos".

Por su parte, el director general del IB-Salut admitió que no ha sido fácil congeniar 17 modelos de tarjeta sanitaria y 17 sistemas de receta electrónica diferentes y reveló que todo esta interoperabilidad de los diferentes modelos está siendo pilotada por el ministerio de Sanidad. Fuster recalcó que será este último organismo el que fije los pagos entre autonomías por los medicamentos prescritos a sus usuarios en las islas y viceversa.

Por último, el presidente de los farmacéuticos de Balears subrayó la "tremenda complejidad" que ha supuesto alcanzar esta interoperabilidad tanto de las tarjetas sanitarias como de las recetas electrónicas diversas que rigen en los diferentes territorios del país. Un hecho que, resaltó, permitirá a los boticarios de las islas acceder a las historias farmacológicas de los usuarios de otras CC AA.

Ayer, primer día en vigor de esta interoperabilidad, a las diez y media de la mañana, dos horas y media después de su entrada en funcionamiento, seis usuarios de otras CC AA ya habían retirado fármacos en boticas de esta comunidad.