­Pimeco acusó ayer a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de defender los intereses de los grandes operadores comerciales en lugar de velar por el equilibrio en el sector, por sus críticas a la moratoria de grandes superficies de Mallorca.

Después de que la CNMC calificara el martes en un informe de injustificada, contraria al interés general y perjudicial para los consumidores la moratoria de grandes superficies previa a la elaboración del Plan Director de Equipamientos Comerciales de Mallorca, Pimeco aseguró en un comunicado que dicha limitación de las grandes superficies "ha protegido el pequeño comercio de Mallorca y la economía local".

El presidente de la patronal mallorquina Pimeco, Toni Fuster, recalcó que la moratoria "ha sido un acierto y ha ayudado a proteger al pequeño comercio de Mallorca frente de la voracidad sin límites de las grandes superficies comerciales".

Pimeco reiteró su "apoyo incondicional" al Consell de Mallorca en la aplicación de dicha moratoria y del posterior Plan de Equipamientos Comerciales, y ha criticado que el informe de la CNMC confirma "su posicionamiento al lado de los grandes operadores comerciales que quieren seguir imponiendo su modelo, consumiendo territorio y atacando al pequeño comercio". "Desde Pimeco nos rebelamos y apostamos, como las instituciones en estos momentos, por un modelo económico y comercial equilibrado y sostenible en el que el pequeño comercio tenga su sitio", dijo Fuster.

Números "cuestionables"

Pimeco cuestionó "seriamente la veracidad de los números presentados en el informe de la CNMC", según el cual los consumidores habrían perdido 23,8 millones de euros anuales por esta moratoria. "Con este planteamiento ultraliberal lo que hacemos se premiar la competencia pura y dura en el mercado a partir de precios bajos por encima de otros factores como el servicio o la calidad", insistió Fuster.