El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, negó ayer que haya habido trato privilegiado en la elección de Iñaki Urdangarin de la prisión de mujeres de Brieva (Ávila). "La crítica es necesaria, pero tenemos que tener cautelas", señaló ayer el ministro señalado al referirse al ingreso en prisión del marido de la Infanta Cristina. Ante la pregunta si cualquier penado podría haber elegido el módulo para hombres de la cárcel de mujeres de Ávila, Grande Marlasca contestó que "por supuesto que lo podría haber elegido otro ciudadano".

Marlaska recordó que ahora Instituciones Penitenciarias tiene un plazo de dos meses para evaluar el tratamiento individualizado idóneo para Urdangarin, que incluye determinar "cuál es el centro penitenciario que ofrece las condiciones". También recordó en la entrevista que Jaume Matas, condenado también por el 'caso Nóos', ingresó por su propia voluntad en la prisión madrileña de Aranjuez. "Hay que tener mucho cuidado en generar pequeñas desconfianzas en las instituciones", ha señalado.

Marlaska recordó la posición del presidente Pedro Sánchez para diferenciar las decisiones sobre los presos catalanes o Iñaki Urdangarin con los de la banda terrorista ETA, para quienes dirigentes del PSOE también reclaman un acercamiento al País Vasco una vez que se ha disuelto la banda terrorista.El ministro defendió que el sistema penitenciario se caracteriza por el tratamiento individualizado y la reinserción. "La dispersión fue muy positiva, necesaria, avalada por normas internacionales. Ahora la realidad es otra", reflexionó.