La unidad política en Balears para lograr un Régimen Especial que responda a las aspiraciones de las islas ha quedado truncada con el desmarque del PP ante la llegada a La Moncloa de Pedro Sánchez. Hasta ahora, la discreción rodeaba los avances en las negociaciones entre la consellera de Hacienda, Catalina Cladera, y el equipo del exministro Cristóbal Montoro. El lunes, el líder del PP balear, Biel Company, desveló lo que según él ya se había acordado, con cálculos según los cuales la oferta del Ejecutivo de Rajoy se traduciría en 380 millones de euros anuales para las islas, e instaba a la presidenta del Govern, la socialista Francina Armengol, a firmar ya con Sánchez este REB. Ayer, los partidos del Pacto acusaban a Company de "deslealtad institucional", además de poner en duda sus cifras.

Aunque el Gobierno de Rajoy aseguró en su día que en el primer trimestre de este año se consensuaría el REB, las negociaciones se han ido alargando ante la falta de acuerdo en unas pocas cuestiones, las más relevantes la inclusión del descuento de residentes del 75 por ciento para los trayectos con la Península y el montante económico que debe suponer el fondo de insularidad. Tanto Armengol como Cladera han afirmado desde que triunfó la moción de censura contra Rajoy que mantendrán la contundencia reivindicativa en este asunto ante el nuevo Gobierno socialista, con el que confían alcanzar el acuerdo que no consiguieron con Montoro.

Las afirmaciones de Company el lunes, en las que además acusaba a Armengol de haber retrasado el acuerdo por estrategia política, han sentado especialmente mal a las fuerzas del Pacto. "Si las declaraciones de Company no son deslealtad institucional, que explique por qué no habló mientras fue ministro Montoro", dijo ayer el portavoz parlamentario socialista, Andreu Alcover.

Para Alberto Jarabo, portavoz parlamentario de Podemos, la "deslealtad" de Company con este asunto es además "un tanto impúdica". Al igual que Alcover, Jarabo recordó que mientras el Gobierno central estuvo en manos del PP, el líder balear de los populares "no comentó nada de las negociaciones con el Govern".

Josep Ferrà, portavoz parlamentario de Més per Mallorca, consideró "fuera de lugar" estas declaraciones de Company. Añadió que en estos momentos "ni el señor Company ni el PP a nivel de Balears o del Estado" representan a ninguna institución. A su vez, pidió al Govern que "se reactiven" las negociaciones con el nuevo Gobierno estatal para "intentar mejorar al máximo" el documento y "que se apruebe lo más pronto posible".

La exigencia de Company incide en el endurecimiento de la oposición del PP al Govern de Armengol ante la pérdida del Gobierno central. Sus declaraciones el lunes quedan lejos de las que efectuó tras su primera reunión con Armengol en agosto del pasado año como presidente de los populares de las islas, cuando insistió en su intención de trabajar "codo con codo" con la presidenta para lograr un buen REB.

"Agachar la cabeza"

La estrategia del PP de poner en entredicho la capacidad de Armengol para obtener un buen trato para Balears por parte del Gobierno de Sánchez quedó clara ayer cuando la portavoz parlamentaria popular, Marga Prohens, le acusó de "haber agachado ya tres veces la cabeza" ante el nuevo Ejecutivo. Precisó que las dos primeras eran la retirada de las enmiendas del PSOE a la propuesta de Presupuestos del Gobierno de Rajoy y la aceptación de que la reforma laboral no se derogará.

La tercera, según resaltó, el voto en contra en el Senado el lunes de las enmiendas de Compromís para que se incluyeran en los presupuestos estatales 105 millones con cargo al protocolo de intenciones firmado en 2015 con Montoro para carreteras, que nunca se concretó para que llegaran los fondos. A ello se sumó el voto en contra a las enmiendas de Compromís, a petición de Més, para que el trote reciba las mismas ayudas que el galope en la Península y para subvenciones por las inundaciones.

Alcover recordó ayer que el voto del PSOE se debe al compromiso de Sánchez de respetar los presupuestos del Gobierno de Rajoy. "Los presupuestos del PSOE serán los del próximo año, zanjó.