La secretaria de Estado de Turismo, Bel Oliver, afirmó ayer que la política turística impulsada por el Govern con medidas como la ecotasa o la regulación del alquiler turístico "no se pueden extrapolar" al resto de España, ya que cada Comunidad Autónoma tiene situaciones diferentes. En este sentido, puso como ejemplo que las necesidades de una Comunidad como la balear, "que tiene 1,2 millones de habitantes y 14 millones de turistas", son muy diferentes a las de zonas que reciben un millón de visitantes.

"No es función de la secretaría de Estado extrapolarlo de ninguna manera", dijo Oliver. Añadió que "el trabajo que se ha hecho en Balears en materia turística en los dos últimos años es muy bueno y adecuado, tanto con el impuesto turístico como en el alquiler" para las islas. Sin embargo, en el caso del resto de España "hay que ver cuáles son los problemas y retos" de cada Comunidad Autónoma para establecer una estrategia política de carácter "transversal". Insistió en que cada Comunidad Autónoma "tiene prioridades diferentes" y sus propias competencias en materia turística, por lo que su función es establecer políticas transversales en las que pueda actuar el Gobierno central, partiendo de la base de que "no se pueden aplicar las mismas propuestas a situaciones diferentes".

"El turismo hay que afrontarlo desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental, social y económica, para redistribuir el beneficio económico que aporta y que llegue al máximo de personas", resaltó poniendo como ejemplo que una cuestión que sí hay que afrontar para todo el país es la de las "condiciones laborales" en el sector. Al respecto, mencionó expresamente el caso de las camareras de piso y la necesidad del reconocimiento de las enfermedades profesionales, así como la mejora de las contrataciones y salarios.

Zonas maduras

También consideró que una de las cuestiones que "es evidente que se ha de abordar" es la de la "modernización y puesta al día de las zonas maduras turísticas de toda España". En cuanto a inversiones estatales para impulsar esta modernización en Balears, recordó que hubo estas ayudas durante el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero y que con el Ejecutivo de Mariano Rajoy "se suprimieron drásticamente". Ahora, consideró que antes de plantear qué posibilidades habría de retomarlas, es preciso analizar los presupuestos estatales que están operativos y los que aún no se han aprobado. "Hay que ver cómo se podría instrumentalizar, si se puede hacer y cómo", precisó.

La nueva secretaria de Estado de Turismo, cuyo nombramiento entrará en vigor hoy con su publicación en el BOE, efectuó estas declaraciones en el Parlament, a donde acudió para hacer efectiva su renuncia como diputada del grupo socialista. La hasta ayer portavoz adjunta del PSIB en la Cámara balear fue nombrada para dirigir la política turística del Gobierno de Pedro Sánchez en el Consejo de Ministros del pasado viernes.

Oliver, entre otras cuestiones, dijo que "en la medida" de sus "posibilidades", aprovechará su presencia en el Gobierno estatal para estar "muy atenta" a otros asuntos "importantes para Balears", como puede ser la negociación sobre el REB.

Junto a ello, consideró que su nombramiento como secretaria de Estado supone el reconocimiento por parte del presidente del Gobierno a la "importancia" de Balears como potencia turística en el conjunto de España, al "confiar" en alguien de las islas para dirigir la política del Ejecutivo estatal en esta materia. "Afronto esta responsabilidad con seriedad, muchas ganas e ilusión. Me honra que se haya pensado que desde Balears podemos liderar la política turística del Gobierno de España", concluyó.

Oliver, una de las personas de la máxima confianza de la presidenta del Govern y líder del PSIB, Francina Armengol, fue la apuesta de la jefa del Ejecutivo para un puesto clave para los intereses de Balears en el Gobierno central, al frente de una secretaría de Estado por la que también pugnaba el PSOE canario. El viernes, además de a Oliver, el Consejo de Ministros también nombró a otra de las dirigentes socialistas de la máxima confianza de Armengol para colocarla al frente de la delegación del Gobierno en Balears: Rosario Sánchez, hasta ahora directora general de Coordinación del Govern. Una semana antes, el Gobierno había nombrado a la profesora de la UIB Carmen Orte, otra de las próximas a la líder del PSIB, directora general del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso).

El portavoz parlamentario socialista, Andreu Alcover, quien acompañó ayer a Oliver en su comparecencia ante los medios de comunicación, afirmó que estos nombramientos suponen "situar de nuevo a Balears en el mapa político nacional" ya que en el Gobierno de Rajoy "no existía ningún alto cargo" de las islas y por lo tanto "Balears no tenía influencia".