El Consell de Govern de hoy autorizará a la conselleria de Salud a iniciar el trámite administrativo para adquirir unos nuevos medidores de glucosa que permitirán a algunos pacientes diabéticos de las islas tener mejor controlada su enfermedad sin tener que realizarse los molestos pinchazos en los dedos para obtener una gota de sangre para conocer su nivel de azúcar.
Fuentes a las que ha tenido acceso este diario estimaron que habida cuenta de que tan solo hay una empresa que comercializa estos medidores ( Freestyle libre, de la farmacéutica Abbot), se acortará el procedimiento administrativo que culminará con la entrega de los nuevos aparatos a los diabéticos insulinodependientes que más se beneficiarán con su uso. La previsión de Salud es que finalmente se entreguen a unos 1.400 diabéticos -fundamentalmente pacientes de entre 4 y 17 años, embarazadas y enfermos con el azúcar mal controlado que precisen hacerse un mínimo de 6 controles diarios- y que el coste de la nueva prestación ascienda a unos 1,8 millones anuales. Los Freestyle libre permiten, mediante la colocación de un sensor en el brazo activo durante 15 días, realizarse cuántos controles se estimen necesarios pasando el medidor sobre él como si de un escáner se tratara.
