La batería de preguntas ayer en el pleno del Palament a la presidenta del Govern, la socialista Francina Armengol, se vio interrumpida cuando contestaba al portavoz de Podemos, Alberto Jarabo, al sonar desde un móvil de la bancada popular El Novio de la Muerte, uno de los himnos más simbólicos de la Legión. Todas la miradas se dirigieron al popular Antoni Camps, quien con gestos expresivos aseguró que en esta ocasión no era el culpable. El movil pertenecía a su compañera de grupo Misericordia Sugrañes, según admitió ella misma.

Poco antes Jarabo había recordado que cuatro ministros del PP cantaron El Novio de la Muerte en la procesión del Cristo de la Buena Muerte la pasada Semana Santa en Málaga. En ese momento sonó la música del móvil de Sugrañes por primera vez, pero fue cuando contestaba Armengol cuando se escuchó con más nitidez.

El presidente del Parlament, Baltasar Picornell, pidió entonces silencio y respeto al PP, mientras Armengol interrumpía su intervención sorprendida. "Es una lástima que el respeto y la democracia no vayan con el PP, pero en fin...", reprochó la presidenta al retomar la palabra.