Después de que el juez rechazara suspender de forma cautelar las ayudas al catalán del Ayuntamiento de Pollença, tal como había requerido María Salom, la presidenta del Govern, Francina Armengol, pidió a la delegada del Gobierno que no utilice su cargo "para atacar a las Illes Balears" y que lo aproveche para beneficiarlas.

Armengol mostró su satisfcción por la decisión judicial: "Es una buena noticia que el tribunal haya tumbado esta demanda de la Delegación del Gobierno. Y creo que esto le debería hacer reflexionar a la delegada, la señora María Salom, sobre si no convendría que utilizara su cargo institucional para beneficiar a estas islas". En ese sentido, la presidenta del Govern afirmó que había quedado demostrado "una vez más" que la Delegación del Gobierno, y María Salom, "quiere hacer una política partidista utilizando las instituciones del Estado".

Armengol mencionó que "hay muchas cosas por las que podría luchar y defender" la delegada del Gobierno, "entre ellas el REB, la mayor presencia de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y tantas y tantas cosas".

La OCB quiere "equilibrio"

También ayer, la Obra Cultural Balear (OCB) pidió a Salom que "sea coherente con sus palabras y empiece esta labor a favor del equilibrio entre las dos lenguas cooficiales". La OCB denunció la "discriminación" del catalán en administraciones estatales, donde solo es posible conseguir impresos en lengua castellana.