La familia Nadal mostró ayer su satisfacción por la aprobación por parte del Parlament balear de la polémica enmienda incluida en la Ley de Vivienda de Balears por la que se permite la ampliación del centro de tenis y la conversión de la residencia para aspirantes a tenistas en un hotel.

En un comunicado, los Nadal quisieron "aclarar las opiniones controvertidas que han surgido sobre el centro en las últimas semanas". Poder comercializar el proyecto deportivo es el motivo por el que el centro solicitó el uso turístico deportivo, "ya que en caso contrario la comercialización internacional es muy dificultosa y no se puede acceder a las plataformas de venta en internet".

El comunicado destaca las necesidades de la academia que se concretan en tres: tener más pistas, varias de ellas cubiertas, y darle uso turístico deportivo. La entidad señaló que disponer de pistas de tenis cubiertas es necesario por las dificultades meteorológicas que impiden la enseñanza y la práctica del alto rendimiento.

En su aspiración de que Manacor sea "cuna de futuros deportistas", la academia ampliará las instalaciones deportivas para equipararse a sus competidores internacionales con más pistas y espacio de análisis 360º, preparación física, fisioterapia, psicólogos, nutrición y medicina deportiva.

Según la academia, la ley anterior de 2012, contemplaba 70 habitaciones (140 plazas tuteladas) y 36 apartamentos (216 plazas no tuteladas), hasta un total de 356 plazas; y la nueva Ley reconoce 354 plazas, dos menos que con la anterior regulación, pero "con una distribución distinta que en esencia lo que permite es el alojamiento de deportistas profesionales en periodos de larga estancia de entreno o de concentración".

Compensaciones económicas

En cuanto a las compensaciones económicas públicas realizadas por el centro, en 2012 cedió de 3.126 metros cuadrados de zona verde al Ayuntamiento de Manacor y se ocupó del mantenimiento anual, y aportó 288.000 euros en concepto de prestación económica compensatoria del aprovechamiento urbanístico. La nueva ley estipula la cesión de otros 2.600 metros cuadrados de zona verde acondicionada en suelo urbano de Manacor que se efectuará mediante prestación económica; el pago del 15 % del aprovechamiento urbanístico mediante prestación económica compensatoria y pago de los terrenos y obra de unos aparcamientos públicos contiguos de unos 3.500 metros.

También establece el pago, junto con el Ayuntamiento de Manacor, de una rotonda para propiciar el cambio de sentido en la carretera de Son Forteza y las que correspondan al plan de movilidad que establezca el Consell de Mallorca para facilitar la circulación.

El comunicado de Nadal se produjo después de que el pleno del Parlament aprobara definitivamente la polémica enmienda por la que se permite la ampliación del centro de tenis y la conversión de la residencia para aspirantes a tenistas en un hotel, con los partidos del Pacto divididos en este asunto hasta el último momento. La iniciativa salió adelante con los votos a favor del PSIB, PP, Ciudadanos y El Pi. Las llamadas de Podemos y Més a los socialistas para que dieran marcha atrás no hicieron mella en el PSIB, que mantuvo su respaldo a la inclusión de esta enmienda en la primera Ley de Vivienda de Balears. El diputado del PP Rafael Nadal, tío del tenista, se ausentó del pleno para no participar en el votación.

"Urbanismo a la carta"

Podemos y Més per Menorca, que habían pedido el voto particular a la enmienda, coincidieron en calificarla como "urbanismo a la carta" y en insistir en que no debería formar parte de la Ley de la Vivienda, con la que no está relacionada.

"Les pido por ultima vez que por favor nos situemos todos los partidos progresistas al nivel del país que puede salir esta semana", dijo sin éxito al PSIB Carlos Saura, de Podemos, en referencia a la posibilidad de que prospere la moción de censura del PSOE contra Mariano Rajoy. En palabras de Patricia Font, de Més per Menorca: "Esta enmienda vulnera el principio de igualdad en las leyes, es discriminatoria y plantea dudas de constitucionalidad".

Frente a ellos, el diputado socialista Damià Borràs defendió esta iniciativa dentro de la apuesta por un turismo de calidad, la desestacionalización y diversificación turística y el fortalecimiento de municipios como el de Manacor. La enmienda fue presentada por el PP pero redactada desde la conselleria de Territorio en manos del PSIB

Este asunto enturbió el debate y aprobación de la Ley de Vivienda, una de las más relevantes para el Pacto. La Ley se aprobó con el apoyo de los partidos de izquierdas y el respaldo parcial de Cs y El Pi, mientras que el PP votó en contra del grueso de la iniciativa. Entre otras cuestiones, la Ley reconoce el derecho a una vivienda y obliga a la administración a facilitar el acceso a personas en situación de vulnerabilidad, además de la obligatoriedad de los grandes tenedores de ceder las viviendas que lleven más de dos años vacías para destinarlas a alquiler social cuando haya necesidad.