La presidenta del Govern, Francina Armengol, y la consellera de Servicios Sociales y Cooperación, Fina Santiago, mantuvieron ayer un encuentro en el Consolat de Mar con entidades sociales de las Islas en el que han reclamado un nuevo modelo "más justo y solidario" para la gestión del 0,7 por ciento del IRPF para fines sociales.

En el encuentro participaron representantes de 48 entidades sociales de las Islas, que se han adherido a la declaración "0,7% IRPF social. De les Illes per a les Illes".

En esta línea, el Govern expresó su desacuerdo con la propuesta de distribución por parte del ministerio de Servicios Sociales e Igualdad de los fondos recaudados en la comunidad autónoma a través de la casilla solidaria de la declaración de la renta. Según el Govern, las entidades se han sumado a su petición de destinar todo el dinero que se recaude en Balears a proyectos sociales desarrollados en la comunidad.

La consellera Santiago destacó que "cada ciudadano de las Islas recibe menos que la media estatal". El Ejecutivo incidió en que con la propuesta del Ministerio balear recibiría 2,9 euros por habitante, cuando la media estatal se sitúa en los 4,6 euros. "Sólo aplicando criterios poblacionales, a las Islas les corresponderían 5,1 millones de euros, pero Madrid les asigna 3,2 millones", añadió.