¿Podemos comer carne con tranquilidad en Mallorca?
Creo que sí. El servicio de Seguridad Alimentaria trabaja intensamente para garantizar que los alimentos que llegan a la población de Balears son seguros.
¿En qué situación se encuentran las dos empresas cárnicas investigadas en la actualidad?
Ambas actuaciones están en proceso judicial. Y la Comunidad Autónoma está personada en la causa abierta contra Cárnicas Vicente.
¿Se personará la CAIB
No lo sé. Es una decisión que no tomamos nosotros, sino el Govern a través de la abogacía de la Comunidad Autónoma.
Déme más detalles de la última operación.
En una primera inspección a Cárnicas Luis, en el mes de diciembre, comprobamos que manipulaba carne sin tener autorización para ello ya que era una empresa de distribución de alimentos. Tenía una carnicería y podía vender carne, pero no manipularla y venderla después a otros establecimientos. Y en posteriores visitas comprobamos que almacenaba carne caducada en la nevera y que contaba con una máquina de etiquetado. También comprobamos que carne en mal estado que habíamos inmovilizado había desaparecido. En definitiva, llegamos a la conclusión de que manipulaba la carne y no podía hacerlo y que también presuntamente modificaba el etiquetado de los productos que comercializaba.
¿Cómo iniciaron el expediente?
Todo empezó con la denuncia de un trabajador. Tras estas visitas y como vimos que estaban subsanando las deficiencias, iniciamos el expediente sancionador. Pero también pusimos el caso en conocimiento de la Fiscalía, que decidió investigarlo. Recientemente el juzgado decidió que fuera la Policía y esta nos pidió que les acompañara uno de nuestros inspectores. Las deficiencias estaban subsanadas pero hallaron carne en mal estado escondida.
¿En qué se diferencia la actuación de esta empresa con la de Cárnicas Vicente?
Que mientras esta última ha sido sorprendida mientras distribuía presunto género caducado y reetiquetado, a Cárnicas Luis no le hemos pillado distribuyendo. Descubrir todo esto es muy difícil ya que, te pondré como ejemplo, Cárnicas Vicente usaba albaranes del pedido siguiente para camuflar la caducidad del producto.
¿Cuál era el objetivo final de estas prácticas?
Probablemente sacar beneficios de productos con la caducidad sobrepasada y sin tener en cuenta que esto puede tener un riesgo para la salud de sus clientes.
¿Qué enfermedades se pueden contraer por ingerir carne en mal estado?
Infecciones de todo tipo como salmonella, listeria, campylobacter... Fruto de esos microorganismos se generan toxinas y todo tipo de problemas. Es muy difícil de determinar ya que depende del estado de salud de la persona.
Desde el pasado mes de febrero, una empresa de distribución de lácteos investigada en Inca
Esto no es una práctica aislada, pero tampoco está extendida. Hay muchas empresas de distribución de alimentos que hacen las cosas bien y que están preocupadas porque se está cuestionando su honradez y su trabajo.
La Asociación de Distribución de Alimentos les acusaron de generar alarma con sus actuaciones. ¿Hay que hacer la vista gorda para no inquietar al sector turístico?
No, no hay que hacer la vista gorda. Al contrario. Hay que ser más exigentes tanto a nivel de consumidor como nosotros, los técnicos de seguridad alimentaria. Esta especialidad es cada vez más compleja, cada día se trasponen más directivas de la Unión Europea. El problema es que algunas empresas se han quedado ancladas en el pasado y no se han adaptado a las nuevas exigencias en materia alimentaria. Son ellos, los empresarios de la alimentación, los que tienen que garantizar que los productos que comercializan son aptos para el consumo. Pero algunos no tienen la formación para ello.
Una reunión con ellos a la que usted también asistió escenificó la firma de la paz. ¿En qué términos se ha conseguido?
Nos hemos comprometido a ayudarles trabajando de forma conjunta para conseguir que las cosas se hagan mejor.
¿No puede ser más concreta?
Les hemos propuesto que elaboren una guía de buenas prácticas en la conservación de los alimentos y nos hemos ofrecido a asesorarles técnicamente en este aspecto. También nos hemos comprometido a darles formación en seguridad alimentaria.
Según mis datos, tienen a 30 inspectores para controlar 19.777 establecimientos de 19 sectores diferentes. ¿Son suficientes?
No, no lo son. Por ello, nuestra presión inspectora es más baja que en otras comunidades autónomas. Además, el crecimiento de los establecimientos es imparable. En el año 2012 había 16.585, más de tres mil menos que el año pasado. Lo que te puedo adelantar es que este año tendremos tres inspectores más. Al menos eso espero, las plazas ya están dotadas.
Diez de los 30 inspectores han sido formados en la detección de manipulación de etiquetas. Un tercio de su plantilla. ¿No es esto sintomático de un incremento en estas prácticas?
No es así. Se formó a diez trabajadores para aprovechar un curso pero en realidad tan solo uno o dos se dedican a los reetiquetados. Y en realidad tenemos a 30 inspectores de sector que se dedican a establecimientos y empresas que distribuyen y elaboran y manipulan alimentos y otros 15 inspectores de mataderos. Mientras estos últimos se pueden dedicar a la inspección de sector, los otros no pueden visitar mataderos sin una formación específica. Así que a veces se produce un trasvase de inspectores a los sectores, donde el personal cada vez se está especializando más.
Hablando de mataderos, ¿sigue el de Manacor
Sí. Se trataba de unas instalaciones que estaban muy viejas y fue el Ayuntamiento el que decidió cerrarlo y evitó así nuestra actuación. Creo que se están planteando un cambio de operador en las instalaciones.
¿Desde cuándo está cerrado?
Desde el 13 de abril.
Volvamos con los inspectores. ¿Cómo valora el hecho de que una testigo en el caso de Cárnicas Vicente haya declarado que uno de sus inspectores era cliente de la empresa y se llevaba género gratis para, presuntamente, pasar por alto las irregularidades?
Eso se tendrá que probar en los juzgados, no hay ninguna denuncia contra este inspector que, además, no era el que llevaba el expediente de Cárnicas Vicente. Los inspectores también comen.
¿Nunca ha tenido relación con esta inspección?
Una vez acompañó a un compañero a recoger unas muestras. Si se demuestra que las prácticas de este inspector no eran ejemplares, tomaremos medidas administrativas. Los inspectores saben que tienen que seguir unas normas éticas. Lo que hemos decidido ahora es que este código ético lo pondremos por escrito y los inspectores deberán firmarlo.
¿Qué le puede pasar si se demuestra que favoreció a la empresa investigada?
No lo sé. El expediente que se le abra puede acabar en una suspensión temporal o definitiva.
¿Le conoce personalmente?
Sí.
¿Pondría la mano en el fuego por él?
No. Defiendo el trabajo de todos los empleados de la dirección general, pero no pondría la mano en el fuego por nadie.
Cambiemos de tema. ¿En qué estado se encuentra el decreto que prohibirá las bebidas azucaradas y la bollería industrial en todos los colegios de las islas?
El pasado día 4 concluyó el plazo para la consulta previa. Es un trámite previo a la exposición pública y se trata de una declaración de intenciones de lo que pensamos hacer para que la gente pueda opinar de manera telemática.
¿Alguna sugerencia?
Una particular pidió menús veganos en los hospitales. Como recordarás, el decreto establecerá qué alimentos y bebidas se pueden dispensar en los centros educativos, sanitarios y en los edificios de la conselleria de Salud. Paralelamente haremos programas formativos sobre alimentación saludable con las personas que explotan las cafeterías y las máquinas de vending de estas instalaciones así como con las propias familias y el alumnado.
El primer EPOIB (Estudio sobre la Prevalencia de la Obesidad Infantil y Juvenil en Balears), que data de 2007, determinó que uno de cada cinco niños de las islas tenían sobrepeso. ¿Qué conclusiones ha arrojado el segundo que presentarán en breve?
No te puedo adelantar nada antes de su presentación. Tan solo te puedo decir que hemos mejorado, pero que todavía queda mucho por hacer.
¿Cuánto hemos mejorado?
Un poco. Y se siguen repitiendo los mismos patrones. Como por ejemplo que en Eivissa y Menorca hay más obesidad. O que el nivel educativo de las familias es indicativo del sobrepeso de los menores. A mayor nivel, menor obesidad.
La nueva ley de adicciones pensaba prohibir fumar en terrazas que no estuvieran libres más allá de un techo, sin ningún paramento lateral. Las protestas del sector de la restauración han tenido su efecto y parece que van a recular. ¿Se han salido con la suya por encima de los derechos de los fumadores pasivos?
Lo hemos reconsiderado porque sabemos que la norma actual, que permite un techo y dos paredes laterales, no se está cumpliendo, por lo que resulta absurdo poner una norma más restrictiva. Lo que tenemos que hacer primero es que se cumpla la actual normativa. Lo que nos va a beneficiar es la ordenanza municipal de Palma que establece que en un par de años tienen que desaparecer estos tenderetes.
Desde el Govern alegaron para esta marcha atrás que no querían que una ley que regula otros aspectos muy importantes se atascara. ¿Qué opina?
A mi me gustaría que no hubiera ningún paramento en las terrazas. Pero prefiero que salga la ley con dos paramentos a que no salga la ley.
Dentro de los recintos hospitalarios se sigue fumando. En Son Espases
Yo no puedo enviar un inspector cada día a Son Espases, cada centro debe tener su programa para que la gente no fume.
¿Y subvencionar los tratamientos antitabaco no resultaría más barato que tratar luego las enfermedades que provoca?
Eso ya está sobre la mesa. Los tratamientos antitabaco tienen que entrar en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud. Suponen un coste mínimo frente a otros tratamientos oncológicos. Acabará llegando.
La nueva ley de adicciones no solo prohibirá por primera vez que los menores beban sino que también les impondrá multas si lo hacen. ¿Serán los padres los que las paguen o se arbitrará otra forma de pago como trabajos sociales, por ejemplo?
Solo se prevé sanciones económicas. Y la ley nacional también lo hace así. Estoy en contacto con el plan nacional para que nuestra ley no caiga en incongruencias con la normativa estatal que se está preparando.
¿Cuándo calcula que estarán aprobados el decreto de las comidas escolares y esta nueva ley de adicciones?
Los hemos incluido en el plan normativo para este año.
Había que esperar a mayo para dar por cerrado el brote de hepatitis A declarado en el restaurante Can Terra de Palma. ¿Ya lo está?
No he recibido el informe final, pero el brote ya está cerrado, no ha habido más casos.
¿Con cuántos se ha cerrado?
Con cincuenta.
¿Sigue defendiendo su actuación tras permitir al restaurante que siguiera abierto durante 21 días tras la primera inspección?
Sí, porque todos los casos eran derivados del primero y, por tanto, las actuaciones fueron correctas. El tiempo nos ha dado la razón. El problema de este caso es que había un empresario que no se preocupó de formar a sus trabajadores en algo tan simple como el imprescindible lavado de manos.
