Seis tiqueteros presuntamente implicados en las estafas a hoteles mallorquines de todo incluido por falsas intoxicaciones alimenticias se han dado a la fuga, según un informe policial que constata la imposibilidad de su localización.

Estas personas iban a ser citadas para declarar ante la magistrada María Pérez Ruiz, que investiga en Palma la supuesta trama para estafar a hoteles mallorquines y de Canarias mediante demandas de defensa de los consumidores, presentadas en Gran Bretaña, y tras simular una intoxicación alimenticiasimular una intoxicación alimenticia durante sus vacaciones.

La Guardia Civil detuvo a principios del pasado septiembre a siete personas por este caso, de las cuales únicamente está localizable Laura Cameron, que anteayer declaró ante la jueza y negó cualquier vinculación con las estafas.

En aquella operación policial al menos dos de los tiqueteros identificados como integrantes de la supuesta red y que actuaban en Calvià, Alcúdia, Alcúdiasa Coma y otras zonas turísticas de la isla, consiguieron eludir a los agentes de la Guardia Civil.

Otros seis de los supuestos empleados de Cameron, sospechosos de invitar a turistas británicos a demandar a sus touroperadores y a sus hoteles fingiendo haber sufrido una enfermedad por tomar alimentos o bebidas en mal estado, sí fueron arrestados.

Estas personas, al igual que Cameron, se acogieron a su derecho a guardar silencio cuando fueron puestas a disposición del juzgado de guardia. Los siete detenidos quedaron en libertad sin fianza y sin la prohibición de abandonar España.

Únicamente dos de ellos prestaron declaración en dependencias de la Guardia Civil y negaron haber animado a los turistas a defraudar.

Uno de estos detenidos señaló que su trabajo era contactar con turistas y preguntarles si en sus vacaciones habían tenido algún contratiempo, tipo retraso en los vuelos o enfermedad en el hotel. Si los interpelados contestaban que sí habían padecido demoras en el viaje o intoxicaciones en el hotel, la orden de Cameron era pasar esos datos a una empresa de reclamaciones de consumidores de Gran Bretañapasar esos datos a una empresa de reclamaciones de consumidores de Gran Bretaña.

Versión

Esta versión contrasta un poco con la mantenida anteayer por su jefa ante la jueza. La empresaria de la noche explicó que sus tiqueteros únicamente recogían datos en bruto de los turistas, es decir nombres y teléfonos móviles, información que ella facilitaba después a dos empresas de reclamaciones y un bufete británicos especializado en temas de consumo.

Tomarles declaración

Las acusaciones particulares en nombre de hoteleros afectados por las estafas y de la Federación Hotelera de Mallorca tenían interés en tomar declaración a los tiqueteros, pero las gestiones efectuadas por la Policía para localizarlos han resultado infructuosas.

Al menos dos de los investigados se marcharon a Gran Bretaña hace unos meses y han roto el contacto con su abogado, al que le adeudan la minuta.

Fuentes próximas a las acusaciones señalaron ayer que instarán al juzgado a insistir en la citación de los fugitivos, cuya versión sería vital para esclarecer el caso.

De acuerdo con el atestado policial, algunos de los tiqueteros tenían antecedentes policiales por estafa y otro estaba cuando se desarrolló la operación (septiembre) en prisión por supuesto narcotráfico.

Por otro lado, siguen abiertas las gestiones a través de Eurojust para determinar si la presunta estafa se investiga en Gran Bretaña o en Mallorca.