Las playas de Mallorca mantienen su número de banderas azules. El distintivo de calidad que otorga una asociación privada de implantación mundial estará presente este verano en solo 32 arenales de la isla, los mismos que el pasado año. Entra en la lista Cala Major, mientras que sale Can Pere Antoni, a la que le retiraron la distinción en agosto del pasado año por la aparición de residuos plásticos. El único avance viene de la mano de los puertos: dieciséis dársenas logran el reconocimiento, dos más que en 2017.

Así, Mallorca, uno de los destinos de referencia del turismo de sol y playa, luce solo 32 de las 696 banderas azules que habrá este año en la costa española. Los datos fueron dados a conocer ayer por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac).

En Palma repite un año más Cala Estancia y se suma esta temporada la playa de Cala Major. Entretanto, la retirada temporal de la enseña de Can Pere Antoni -en agosto de 2017- a causa de la aparición de fragmentos de plásticos quemados, se ha convertido finalmante en definitiva.

El resto de municipios no sufre ninguna variación. Figuran en la lista es Carregador, Palmanova, Son Maties, Illetes, Cala Contesa y Peguera Torà (Calvià), Sant Elm (Andratx), Cala Molins, Cala Barques y Formentor (Pollença), Playa de Muro (Muro), Can Picafort, Son Bauló y Son Serra de Marina (Santa Margalida), Cala Agulla, Canyamel, Cala Mesquida y Font de sa Cala (Capdepera) y Cala Millor-Son Servera y es Ribell (Son Servera). También aparecen Cala Millor y sa Coma (Sant Llorenç des Cardassar), Cala Marçal, Cala Ferrera, Porto Colom-Platja s'Arenal y Cala sa Nau (Felanitx), Cala Gran, Cala Mondragó-sa Font de n'Alís y Cala Santanyí (Santanyí) y es Dolç-es Port (ses Salines).

En cuanto a puertos, dos dársenas vuelven a la lista: el Real Club Náutico de Palma y Port de Pollença, que perdieron el reconocimiento en 2017. Además, tres embarcaciones turísticas sostenibles logran la preciada bandera: los barcos Mar Cabrera I, II y III ( en la Colònia de Sant Jordi).