La presidenta del Govern, la socialista Francina Armengol, y el líder del PP balear, Biel Company, han protagonizado esta mañana un tenso enfrentamiento en el pleno del Parlament que, a un año de las elecciones autonómicas, ha servido para que se pasaran cuentas entre la gestión del actual Ejecutivo del Pacto y el de la pasada legislatura en la que Company era conseller del Govern de José Ramón Bauzá.

"El tiempo se acaba, no vuelva a dejarnos un Govern en quiebra como en 2011", ha espetado Company a Armengol tras repasar distintas infraestructuras que, según el líder del PP, han dejado de ejecutar las conselleries en lo que va de legislatura. Armengol ha recordado al dirigente popular que, en lo que se refiere a la situación de las arcas autonómicas, el Govern cerró 2017 con superávit a la vez que cumplía con el déficit. La jefa del Ejecutivo ha repasado los distintos planes de infraestructuras puestos en marcha en esta legislatura en materia educativa, sanitaria, hidráulica o de vivienda, frente al "cero" que ha puesto de nota al anterior Ejecutivo del PP en lo que se refiere a infraestructuras.

"Leáse los documentos y ahí tendrá la respuesta", ha replicado a Company tras afirmar que "la política de infraestructuras del actual Govern es inversa" a la del Govern de Bauzá. Como colofón, ha anunciado que el viernes el Consell de Govern aprobará la autorización para la puesta en marcha del plan de transportes público de Mallorca, con una inversión de 435 millones en diez años. "Marcará un antes y un después en el transporte colectivo", ha dicho la presidenta balear. "Nuestra prioridad son las personas, devolverles derechos, recuperar servicios y mejorar las inversiones", ha añadido.

El presidente del PP ha acusado a la presidenta de practicar el "victimismo del Madrid nos mata" que, a un año de las elecciones, "ya no sirve de coartada para esconder su mala gestión" y le ha emplazado a "ponerse a trabajar". Entre los ejemplos que ha resaltado Company ha estado el que Armengol diga que no quiere hacer más carreteras y a la vez "se vaya a Madrid a pedir más dinero para carreteras". Esta acusación ha servido a Armengol para atacar directamente al líder del PP por su gestión cono conseller en la pasada legislatura. "A Madrid no le pedimos dinero para nuevas carreteras, sino que nos pague lo que nos debe. No me extraña que usted renunciara a inversiones ferroviarias estatales", ha dicho a Company